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Lando Norris cumplió un sueño de la niñez al ganar el Gran Premio de Mónaco el domingo y aumentó sus chances de alcanzar una meta aún mayor: el título de Fórmula 1.
Norris logró su primera victoria en un Gran Premio desde el Gran Premio de Australia que abrió la temporada (aunque ganó una carrera sprint en Miami este mes) y redujo la ventaja de su compañero en McLaren, Oscar Piastri, de 13 puntos a tres.
Norris partió desde la pole position y bloqueó una rueda en la primera curva, pero aún así logró contener al ganador del año pasado, Charles Leclerc de Ferrari.
“Se siente increíble. Es una carrera larga y agotadora, pero muy divertida”, declaró Norris. “Esto es lo que sueño. Esto es lo que soñaba de niño”.
Leclerc fue segundo después de acercarse a Norris hacia el final de la carrera, aunque no pudo intentar el adelantamiento, mientras que Piastri fue tercero y el campeón defensor Max Verstappen cuarto, con el siete veces campeón Lewis Hamilton en un distante quinto lugar.
Verstappen fue el líder en la pista hasta la penúltima vuelta, pero solo porque aún no había hecho su segunda parada en boxes obligatoria según un cambio de regla introducido en un intento de dar vida al Gran Premio de Mónaco, donde adelantar es casi imposible.
Verstappen casi seguro iba a terminar la carrera en cuarto lugar, sin importar cuándo se detuviera, así que bajó el ritmo, frenando a Norris y permitiendo que Leclerc y Piastri lo alcanzaran. Verstappen parecía intentar presionar a Norris para que cometiera un error costoso, o quizás esperando una parada bajo bandera roja que le hubiera permitido un cambio de neumáticos gratis y mantener el liderazgo.
Norris dijo que el final de la carrera fue “un poco nervioso con Charles cerca y Max delante, pero ganamos en Mónaco, así que no importa cómo ganes, supongo”.
A pesar de las predicciones de que podría permitir que algunos equipos y pilotos dieran una sorpresa, la regla tuvo poco impacto general en los resultados, a excepción de unos pocos casos donde equipos aparentemente desaceleraron un coche para beneficiar a un compañero.
“Perdimos la carrera ayer”, fue el veredicto de Leclerc, refiriéndose a la importancia de clasificar en la pole en Mónaco, su carrera de casa.
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