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NUEVA YORK.- Residentes dominicanos en El Bronx expresan alarma ante las cifras que indican que cada 30 segundos ocurre la amputación de una extremidad por pie diabético en el mundo.
Así lo manifiestan Manuel Rivera, David Torres, Margarita Ruiz, Julia de Hernández, Luis A. Rojas, Kelvin Madera, Delsio Contreras, y Stalin Sierra, entre otros, luego de la advertencia de la semana pasada del médico podiatra Pablo Gallo González, jefe del Servicio de Angiología y Cirugía Vascular, del Hospital Ruber Internacional en Madrid-España.
El pie diabético es la principal causa de amputación no traumática a nivel global. Entre los síntomas iniciales más comunes se encuentran el hormigueo, calambres, pérdida de sensibilidad y lesiones en uno o ambos pies, especifica el doctor.
Estos signos pueden pasar desapercibidos, especialmente en pacientes con neuropatía diabética, lo cual agrava el riesgo. La falta de riego sanguíneo, junto con una infección, suele ser el detonante que impide la cicatrización y aumenta la posibilidad de perder extremidades.
El médico subraya que el pie diabético “no aparece de un día para otro”, sino que es consecuencia de años de mal control metabólico, tabaquismo, hipertensión, colesterol elevado, obesidad y sedentarismo.
En Estados Unidos, según datos de la Universidad de Utah, la diabetes diagnosticada afecta a aproximadamente 38 millones de personas. El tipo 2 es la forma más común, representando alrededor del 90-95% de los casos. Se calcula que casi 88 millones de adultos en EUA tienen prediabetes.
El condado con más muertes por diabetes en EUA es San Bernardino, en California; el segundo es Bexar, en Texas, y el tercero es El Bronx, en Nueva York.
Recientemente, el médico dominicano José de León, podiatra y cirujano en el hospital Montefiore en El Bronx, declaró que mensualmente amputa alrededor de 40 piernas en dicho centro hospitalario a personas con diabetes, principalmente a hispanos y afroamericanos.
El índice de diabéticos en el área del hospital Montefiore es uno de los más altos de los EUA, y es uno de los hospitales que más amputaciones realiza en territorio estadounidense, debido al descontrol de la enfermedad y a las complicaciones de tenerla sin control.
“Mi recomendación -expresa el doctor De León- es que si la persona es diabética debe hablar con su médico, necesita controlar su azúcar, perder peso si tiene sobrepeso, tener una alimentación balanceada, mantenerse activo haciendo ejercicio, caminando y ver a un especialista de los pies por lo menos dos veces al año”.
