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Washington, Estados Unidos.- El Caucus Hispano del Congreso (CHC) de Estados Unidos denunció este jueves las condiciones “crueles e inhumanas” que se dan en los centros de detención para migrantes de la administración de Donald Trump, después de haberlos visitado.
Las visitas a los centros se llevaron a cabo “sin previo aviso” y por los propios legisladores, entre ellos el líder del CHC, Adriano Espaillat, y la congresista demócrata de Nueva York, Nydia Velázquez, quien los definió como “cárceles con fines de lucro” donde no se respetan los derechos constitucionales.
” Lo que nosotros y nuestros colegas presenciamos fue un ‘sistema’ utilizado para castigar a las personas simplemente por ser migrantes”, agregó Velázquez.
La congresista de Texas, Sylvia García, visitó una de estas instalaciones en el estado al que representa, en Houston, y explicó que el gobierno ha convertido al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) en “una unidad policial secreta” quienes “llevan máscaras y tienden emboscadas” para detener a los migrantes.
” No se trata solamente de ellos, se trata del Estado de derecho. Se trata de si ‘tu gobierno’ puede secuestrar a un niño en una parada de autobús por el color de su piel y enviarlo a una prisión sin ir a juicio, sin abogado y sin recurso alguno, porque eso es lo que ocurre”, apuntó García.
La legisladora texana relató que de las 800 personas migrantes que había detenidas en el centro que visitó, sólo 10 habían cometido algún delito, el resto estaban “libres” de cargos.
Los legisladores relataron diferentes testimonios de personas de “todos los estatus legales, incluidos los residentes permanentes legales, los cónyuges de otros, ciudadanos y las personas que llevan más de una década viviendo en este país”, que fueron detenidas, en muchos casos, por “sorpresa”.
Después de las visitas, encontraron situaciones en las que había “deficiencias médicas” y en las que no se “cumplían” con la atención básica, además de testimonios sobre amenazas y abusos.
Se reportó incluso un caso de una mujer rusa que tendría que haber sido deportada hace un año y aún seguía en el centro.
De acuerdo con la información presentada, hay unas 50 mil personas alojadas en los centros del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE), y más de 12 mil de ellos se encuentran en el estado de Texas.
” Hoy en día, gastamos tres mil 400 millones de dólares de los contribuyentes en centros de inmigración que no son más que prisiones”, indicó Velázquez.
La legisladora denunció que este dato contrasta con “los 840 millones de dólares” que se dedican al sistema judicial para migrantes con el objetivo de procesar sus casos y que los tribunales les asistan.
El plan de los demócratas es “pelear” en las cortes, las órdenes ejecutivas y la política migratoria que el presidente Trump está llevando a cabo, porque todos “coinciden que va en contra de la Constitución”.
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