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Sí, el rapero anteriormente conocido como Kanye West, se presentó brevemente el viernes al juicio por tráfico sexual contra Sean “Diddy” Combs en Nueva York para brindar apoyo al magnate del hip-hop, un viejo amigo. No se le permitió el acceso a la sala y se marchó después de observar fugazmente el juicio en un monitor de video en otra habitación.
Ye, vestido de blanco, llegó al tribunal federal de Manhattan antes del mediodía, mientras el juicio estaba en receso, y pasó unos 40 minutos en el edificio.
Tras pasar por un control de seguridad similar al de un aeropuerto, le preguntaron a Ye si estaba en el tribunal para apoyar a Combs.
“Sí”, respondió asintiendo. Luego se dirigió rápidamente a un ascensor y no respondió cuando le preguntaron si podría testificar a favor de Combs cuando la defensa comience su presentación la semana próxima.
El personal de seguridad del juzgado no lo condujo al piso 26, donde se celebra el juicio en una de las salas más grandes del edificio. El acceso está estrictamente controlado, con asientos reservados para la familia y el equipo legal de Combs, los medios de comunicación y los espectadores que hacen cola durante horas para conseguir un puesto codiciado.
El rapero fue conducido a una sala de audiencias tres pisos por debajo de la sala de juicios. Allí, observó brevemente el testimonio en un gran monitor de circuito cerrado en una sala auxiliar, un piso por debajo de lo habitual, que estaba repleta de representantes de los medios de comunicación y empleados del juzgado que, erróneamente, oyeron que él podría estar allí.
A medida que se difundió la noticia de su ubicación real y los espectadores llegaron a la sala donde Ye estaba sentado en la primera fila con el hijo de Combs, Christian, un guardaespaldas y otro partidario de Combs a un lado de la sala que de otro modo se mantenía vacío por un oficial de la corte, Ye miró alrededor de la sala antes de levantarse abruptamente y marcharse, junto con los demás que estaban con él.
Ye no respondió más preguntas mientras salía del tribunal, pasando junto a periodistas y cámaras de televisión y subiéndose a un sedán Mercedes negro que lo esperaba.
En la sala del tribunal donde se celebró el juicio, Combs, de 55 años, parecía eufórico y consciente de la visita de su amigo, mientras familiares, incluida su madre, observaban el proceso. Se declaró inocente de los cargos de tráfico sexual y conspiración para cometer delitos, alegando que usó su fama, fortuna y violencia para cometerlos durante 20 años.
La comparecencia de Ye en el tribunal se produjo un día después de que una mujer identificada en el tribunal solo por el seudónimo “Jane” terminara seis días de testimonio.
Ella testificó que durante una relación con Combs que se extendió desde 2021 hasta su arresto en septiembre pasado en un hotel de Manhattan, se sintió obligada a tener frecuentes maratones sexuales de varios días con trabajadores sexuales masculinos mientras Combs observaba y, a veces, filmaba los encuentros alimentados por las drogas.
Los abogados defensores han argumentado que Combs no cometió ningún delito y que los fiscales federales estaban tratando de controlar las relaciones sexuales consensuadas que ocurrieron entre adultos.
El jueves, Jane testificó que durante una pausa de tres meses en su relación con Combs, voló a Las Vegas en enero de 2023 con un famoso rapero que era amigo cercano de Combs.
Antes del testimonio de Jane sobre el tema, los abogados y el juez llevaron a cabo una larga audiencia fuera de la vista del público para discutir lo que se podría divulgar sobre el viaje de enero.
A Jane se le preguntó si el rapero al que acompañaba, junto con su novia, era “un individuo en la cima de la industria de la música también… un ícono en la industria de la música”.
“Sí”, respondió Jane.
Una vez en Las Vegas, testificó Jane, fue con un grupo que incluía al rapero a cenar, a un club de striptease y a una fiesta en una habitación de hotel, donde una trabajadora sexual tuvo relaciones sexuales con una mujer mientras media docena de personas más observaban.
Dijo que estaban bailando y que el rapero le dijo: “Hola, guapa”, y le dijo, con lenguaje grosero, que siempre había querido tener sexo con ella. Jane dijo que no recordaba exactamente cuándo, pero que le mostró los pechos mientras bailaba.
También el viernes, el juez dijo que se inclinaba por remover a un miembro del jurado y reemplazarlo por un suplente después de que los fiscales encontraran inconsistencias en sus respuestas sobre dónde reside.
Durante la selección del jurado, el jurado declaró vivir en el Bronx. Sin embargo, según la fiscalía, le contó a un empleado del tribunal que se había mudado recientemente a Nueva Jersey.
Al ser interrogado por el juez Arun Subramanian, el jurado reconoció haberse mudado, pero afirmó que conserva su licencia de conducir de Nueva York y que reside allí entre semana. Solo los residentes de Nueva York pueden ser jurados en el tribunal federal de Manhattan.
Los abogados de Combs lo calificaron como “un esfuerzo apenas disimulado para destituir a un jurado negro” y sugirieron que Subramanian estaba “confundiendo inconsistencias con mentiras”.
El juez señaló que incluso si el jurado es expulsado, el jurado sería diverso.
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