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“La operación se centró en los negocios que son dueños y hacen competir caballos de pura sangre y caballos cuarto de milla fuera de los establos del hipódromo, y en los empleados que trabajan para ellos y cuidan a estos caballos”, detalló ICE en un comunicado de este miércoles.
Las autoridades aún están procesando las identidades de los arrestados, pero el organismo identificó a dos mexicanos con historial criminal.
El primero es Enrique González Moreno, de 36 años, quien ha ingresado “ilegalmente” cuatro veces a Estados Unidos, donde fue sentenciado por conducir bajo influencia de sustancias, posesión de cocaína y reingreso ilegal al país.
El segundo es otro mexicano de 40 años, cuyo nombre no se compartió, que ha sido arrestado antes por conspiración criminal, agresión agravada con un arma, agresión sexual y video voyeurismo.
Los oficiales todavía no identifican las nacionalidades de los otros migrantes, procesados por violaciones migratorias administrativas y trasladados a la estación de la Patrulla Fronteriza en Lake Charles, Luisiana, donde también se indaga una potencial conducta criminal por la contratación de indocumentados.
Asimismo, los agentes de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) están trabajando para identificar cualquier otra actividad criminal, además de las violaciones migratorias y la explotación laboral.
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“A veces, cuando realizamos estos operativos en sitios de trabajo, descubrimos otras formas de conducta criminal, como fraude de documentos y beneficios, lavado de dinero y trata de personas”, expresó Eric DeLaune, agente especial a cargo del ICE HSI en Nueva Orleans.
El operativo ocurre después de la orden del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de continuar con las redadas migratorias en lugares de trabajo como obras de construcción, hoteles y restaurantes, a pesar de declaraciones del fin de semana que sugerían que iba a suavizarlas para no afectar estos sectores.
Además, Luisiana es uno de los estados, junto con Texas y Florida, en los que el Gobierno federal desplegó a 700 efectivos militares para apoyar en los operativos migratorios, según informó este martes el Pentágono.
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