Salud

Jet Set: Sulay Heredia fue el gran amor de su marido y la alegría de sus dos hijos

2025 06 759587873.png
Madre de dos niños, de 9 y 15 años, y se desempeñaba como asistente administrativa.

Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.

Sulay Heredia contaba con 45 años al momento del derrumbe. Madre de dos hijos, de 9 y 15 años.

Quince años de relación, dos hijos y la dicha de haber compartido la vida con una persona maravillosa, excelente madre y esposa, es el consuelo del que se aferra Álex de León, esposo de Sulay Heredia Sena, quien falleció en la madrugada del martes 8 de abril en el colapso del techo de la discoteca Jet Set.

Sulay Heredia tenía 45 años cuando ocurrió la tragedia. Madre de dos niños, de 9 y 15 años, y se desempeñaba como asistente administrativa. Salió el lunes 7 de abril a compartir con tres amigos y a disfrutar del repertorio del merenguero Rubby Pérez, pero al igual que dos de sus amigas, no logró escapar de ese final trágico.

“Álex, Sulay no me contesta el teléfono”, fueron las palabras que alertarían a Álex el martes a las 5:00 de la mañana, mientras aún estaba somnoliento al tomar esa llamada de una amiga mutua de la pareja.

“En sueños, todavía me pregunto a ella de qué me hablas. Ella me dice: ‘No, que pasó esto en el Jet Set’. Y ahí yo me levanto, no la veo en la cama, y usualmente ella iba y se acostaba en el cuarto de mi niño, y estaba esperando que ella estuviera ahí, pero cuando abrí la puerta, no estaba, solo estaba mi niño pequeño”, explicó de León.

El impacto

Pero no fue hasta el momento de presentarse en la zona cero de la tragedia que Álex conectó con la realidad en la que también estaba su esposa.

“Al principio me dicen las amistades que hay hospitales que tienen cuerpos sin identificar, pero yo pensaba que ella tuvo un accidente y se la llevaron al hospital”, narra.

Y prosigue: “Yo no sabía que había tantas personas muertas; yo pensé que era algo y todo el mundo estaba en un hospital. Para mí todavía era como un sueño hasta que fui al lugar (zona cero) y ahí vi la realidad. Cuando llego al Jet Set y veo eso, me digo: ella no va a salir de ahí”.

“Todo estaba derrumbado, era un caos, la gente quería saber qué pasaba y lo único que veías era el personal tratando de ayudar”, relató.

Pero a pesar de tener delante un escenario trágico y con pocas esperanzas, Álex seguía con la esperanza de que Sulay podría salir de allí con vida.

“Vi a un señor moreno salir, estaba frente a mí, las esperanzas regresaron y sacaban más muertos y más muertos”, dice.

Tres días después

“Vi a una señora embarazada que salió también, que hasta me dio alivio. Dije: ay Dios mío, Señor, por favor, que salgan más personas”, pero por un vivo, salían 20, 30, 50 muertos… El jueves yo salí de allá a las 11:00 de la noche y vi a una señora salir de ahí caminando, y ahí dije: ¡Wao, qué milagro!

Fue el viernes 11 de abril de esa semana cuando de León confirmó definitivamente el fallecimiento de su esposa.

De cuatro personas que salieron a disfrutar ese lunes merenguero, José Luis Herrera fue el único sobreviviente del grupo. Sulay y sus amigas Yeraldine Rodríguez y Nelcida Melo perdieron la vida.

VISITE NUESTRA SECCIÓN ESPECIAL SOBRE LA TRAGEDIA DEL JET SET

Convivir con la ausencia

Aunque algunos días parezcan normales, y otros no tanto, Álex y sus dos hijos aprenden a vivir con la ausencia de una pieza clave en su familia, con ayuda de familiares, amigos y atención psicológica.

“Hay días donde todo parece tranquilo, pero hay días donde uno se pone a llorar por la rabia y la impotencia de lo que está pasando, y cosas que pudieron no pasar, pero… Dios sabrá”, expresó Álex.

La conexión

El 1997 fue el año que conectó a Álex con Sulay, “el amor de su vida”, como él mismo la definía con los ojos brillantes mientras se sonrojaba.

Ahora, tras quince años de unión, persiste su amor en el tiempo.

Juntos, físicamente, tenían 15 años. “A ella yo la conozco, como dice Sergio Vargas: 1997. Nos conocimos en un trabajo… es como que el destino nos juntó, porque yo la conozco y ella me gustó, pero por desgracia yo salgo de la compañía”, dice.

Agrega que se dejaron de ver un año y medio “y yo estaba haciendo un trámite y ella fue la que me atendió. Y ahí empezamos a ser amigos nuevamente hasta que finalmente me dijo un sí, pero las cosas no fueron color de rosas y rompimos. (Pero) había algo que nos llevaba de nuevo y después de un tiempo regresamos”, dijo.

TRA Digital

GRATIS
VER