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Según el secretario adjunto de la OEA, Néstor Méndez, 24 secciones del documento han logrado acuerdo entre los Estados miembros, pero siete aún están en discusión. Las negociaciones continuarán hasta el viernes, último día de la Asamblea, en la que deberán acordar una resolución o esta se someterá a votación. La resolución, impulsada por Estados Unidos, insta a los Estados miembros a “intensificar urgentemente sus esfuerzos para la aplicación de soluciones concretas” ante la grave situación en Haití. Además, solicita que “brinden apoyo” a la misión de seguridad desplegada el año pasado en ese país, liderada por Kenia, con el patrocinio de Estados Unidos y el respaldo de la ONU. El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, cuyo país es el principal donante de la OEA, exigió en mayo al organismo que diera “un paso adelante” en la búsqueda de soluciones para Haití. Leer más: Cuestionan la razón de ser de la OEA por su inacción ante Venezuela y Haití. La situación en Haití, donde las bandas armadas siembran el terror con ataques, asesinatos, secuestros y violaciones, ocupa un lugar central en la Asamblea General de la OEA. El nuevo secretario general del organismo, Albert Ramdin, quien sucedió en mayo a Luis Almagro, ha dicho que la crisis en Haití es una de sus mayores prioridades y que resolver la situación es “un deber moral” del organismo. Durante su discurso inaugural de la Asamblea el miércoles, Ramdin explicó que está desarrollando un plan integral que contempla la entrega de ayuda humanitaria al país caribeño, la celebración de elecciones en ese país y la creación de oportunidades económicas.
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