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Nueva York — Andy Byron, director ejecutivo de la firma tecnológica Astronomer, se encuentra en el centro de una controversia que mezcla espectáculo, vida personal y plataformas digitales.
El ejecutivo fue capturado por la famosa “kiss cam” en un concierto de Coldplay, abrazado a Kristin Cabot, directora de Recursos Humanos de la misma empresa, en lo que miles de usuarios han interpretado como un caso de posible infidelidad.
La escena, grabada mientras sonaba “Viva la Vida”, muestra a Byron y Cabot disfrutando del momento, hasta que ambos se dan cuenta de que están siendo transmitidos en la pantalla gigante del estadio. En ese instante, su expresión cambia radicalmente: ella se cubre la cara y él se agacha intentando pasar desapercibido.
Incluso el vocalista de la banda, Chris Martin, bromeó al respecto desde el escenario: “Oh, miren a estos dos… o están teniendo un romance o son muy tímidos”, generando una ola de risas entre los presentes.
Lo que comenzó como un momento incómodo en un concierto pronto se convirtió en una tormenta mediática. El video se viralizó rápidamente, desatando una ola de reacciones en redes sociales, donde usuarios especularon sobre una posible relación extramarital entre los dos ejecutivos.
La polémica se intensificó al saberse que ambos están comprometidos sentimentalmente con otras personas.
Byron está casado con Megan Kerrigan Byron, madre de sus dos hijos, con quien vive en Nueva York. Cabot, por su parte, mantiene una relación con un empresario del sector textil y calzado.
La reacción de Megan Kerrigan no se hizo esperar. Después de que el video se hiciera viral, eliminó el apellido “Byron” de sus perfiles en redes sociales, donde solía compartir imágenes familiares.
Este gesto fue interpretado como una señal de ruptura o distanciamiento ante el escándalo.
Su perfil de Facebook fue inundado por mensajes de apoyo de desconocidos que expresaron solidaridad con ella.
Comentarios como “Tú no te mereces esto”, “Espero que estés rodeada de gente que te apoye” y “Es triste ver que una mujer tan dedicada pase por esto” se multiplicaron. Horas después, Megan eliminó por completo su cuenta.
Hasta el momento, ni Byron ni Cabot han ofrecido declaraciones públicas sobre el asunto, y la empresa Astronomer tampoco ha emitido ningún comunicado oficial.
El incidente ha desatado un debate sobre la privacidad de las figuras públicas, las dinámicas de poder en el ámbito laboral y los límites entre la vida profesional y personal. Mientras tanto, el nombre de Andy Byron sigue en el centro de una polémica que, por ahora, parece lejos de acabar.
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