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Atenas.- Cientos de bomberos se afanan este viernes en Grecia por contener las llamas de siete incendios en varias zonas del país, con al menos 1.300 personas evacuadas hoy, en medio de un calor sofocante que elevó los termómetros a 45,6 grados.
Seis de los siete incendios se originaron este viernes, mientras que más de 350 bomberos siguen trabajando por cuarto día consecutivo contra el gran fuego declarado en la región de Corinto (sur) el pasado martes, dijo a EFE una portavoz de los Bomberos.
El fuego que más preocupa a las autoridades es el que arde en las afueras de la localidad de Kilkis (norte), de unos 20.000 habitantes, que ya ha forzado la evacuación de un campus universitario y un hotel.
Decenas de animales de granjas cercanas fueron trasladados a lugares seguros, y también se han escuchado algunas explosiones en la zona del incendio, sin que hasta ahora se haya podido esclarecer qué las provocó, informó la emisora pública ERT.
Actualmente, unos 90 bomberos con 32 camiones, 2 helicópteros y 3 aviones cisterna intentan contener las llamas para que no se acerquen al pueblo que está densamente poblado.
Unos kilómetros más al oeste, en la región de Kastoria, cerca de la frontera con Albania, unos 25 bomberos luchan contra un incendio forestal que por el momento no amenaza zonas pobladas.
En la región de Ioánnina, también situada en el noroeste del país, más de 35 bomberos con 3 camiones, tres aviones y un helicóptero cisterna luchan contra un incendio cerca del pueblo Pedini.
Sin embargo, en un vídeo publicado por el portal regional Epirus Gate se puede ver cómo una casa es alcanzada por el fuego.
Mientras, otros 60 bomberos operan para sofocar otro incendio forestal a dos kilómetros al norte de la Antigua Olimpia, en el Peloponeso, aunque por ahora este importante yacimiento arqueológico donde cada cuatro años se celebra el encendido de la llama olímpica, no corre peligro alguno, informó la portavoz.
La situación tanto en este fuego, como en el de la región de Mesinia, también en el Peloponeso y por el que tuvieron que ser evacuadas este viernes unas 300 personas, “ha mejorado bastante”, añadió la fuente.
En este y en el incendio declarado también este viernes en la región norteña de Tesprotia, que obligó a evacuar a otras 1.000 personas, los bomberos intentan extinguir pequeños focos de fuego dispersos y tratan de enfriar la zona para que no se reaviven las llamas por los fuertes vientos.
El termómetro subió este viernes hasta los 45,6 grados en Mesinia, mientras que en otras varias regiones y ciudades sobrepasó los 43 grados.
Protección Civil ha advertido de que mañana, sábado, el riesgo de incendios será “extremo” (el máximo nivel en la escala griega de alertas) en toda la región capitalina de Ática, la mayor parte del Peloponeso (sur) y la isla de Eubea, ya que al calor tórrido se sumarán vientos más fuertes, que soplarán desde el norte.
La ola de calor persistirá hasta al menos el próximo lunes, cuando empezará una gradual disminución de las temperaturas, según los pronósticos.
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