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“El 30 % de los politraumatizados y de los accidentados de tránsito sufren un traumatismo raquimedular, lo que causa una deficiencia neurológica permanente”, afirmó el especialista, al señalar que estos casos afectan, en su mayoría, a jóvenes entre 18 y 40 años.
“A la semana recibimos entre uno y dos jóvenes parapléjicos con lesiones de columna que necesitan algún tipo de abordaje quirúrgico en nuestro Hospital Traumatológico y Quirúrgico Prof. Juan Bosch”, añadió el Dr. Abreu.
El especialista explicó que este tipo de trauma puede tener diversas causas, como caídas de andamios o estructuras. No obstante, resaltó que en República Dominicana un alto porcentaje se origina por accidentes de tránsito, en particular en motocicletas.
“Es increíble la cantidad de competencias ilegales que efectúan motoristas en la autopista Duarte, en los trayectos Bonao-La Vega y La Vega-Santiago, arriesgando su vida en carreras clandestinas”, expresó.
El neurocirujano también detalló el impacto económico que estas lesiones representan para el sistema público de salud.
“El costo de un paciente parapléjico a nivel hospitalario, incluyendo cirugía, instrumentación de columna y manejo en cuidados intensivos, oscila entre un millón y un millón y medio de pesos”, subrayó.
Asimismo, advirtió que las lesiones medulares siguen siendo, hasta el día de hoy, irreversibles.
“Todas las técnicas, tecnologías y terapias están orientadas a estabilizar y alinear la columna vertebral, pero el daño neurológico ya existente es irrecuperable”, explicó Abreu, citando incluso a Hipócrates: “La lesión de la médula espinal es un mal que no se puede curar”.
El neurocirujano resaltó que, una vez intervenido el paciente, comienza un proceso de adaptación que requiere atención multidisciplinaria.
“Orientamos al paciente para que entienda que hay vida después de la paraplejia. A muchos los incentivamos a seguir estudiando o trabajando de alguna manera. Sin embargo, el paciente parapléjico sigue siendo un olvidado del sistema de salud. Por eso, hago un llamado para que tanto las instituciones públicas como privadas adapten sus infraestructuras y permitan la inclusión y movilidad de las personas con discapacidad”, señaló.
El Dr. Abreu, del Hospital Traumatológico Prof. Juan Bosch, en La Vega, enfatizó la importancia de actuar con rapidez y técnica en el lugar del accidente para evitar lesiones adicionales.
“Entre el 40 y el 70 % de las lesiones medulares empeoran por una mala asistencia inicial en el lugar del accidente”, advirtió. En ese sentido, valoró el rol del Sistema 9-1-1 y sus paramédicos, que han contribuido a mejorar el manejo de este tipo de traumas.
También explicó que cualquier ciudadano puede brindar ayuda efectiva si actúa con precaución.
“La principal causa de muerte en un accidente de tránsito es la obstrucción de la vía aérea y la pérdida importante de sangre. Despejar la boca del paciente y detener hemorragias con apósitos puede salvar una vida”, recalcó.
Finalmente, el especialista hizo un enérgico llamado a las autoridades dominicanas para que refuercen el control sobre las carreras ilegales de motocicletas, especialmente en la autopista Duarte, y a las familias para que mantengan una supervisión más cercana sobre los jóvenes.
“Una lesión de columna vertebral puede provocar alteraciones drásticas en la vida, el futuro y el desarrollo de un ser humano”, concluyó.
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