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En el caso de Pumarol, el juez Rigoberto Sena, del Juzgado de Atención Permanente del Distrito Nacional, le impuso tres meses de prisión preventiva que cumplirá en la cárcel de Anamuya en Higüey.
Ayer, desde temprano, dos audiencias mantenían en vilo la atención pública: Los casos de Jean Andrés Pumarol y el comunicador Ángel Martínez.
El Palacio de Justicia de Ciudad Nueva fue el escenario de una carrera contra el tiempo para periodistas y camarógrafos. Apenas el abogado de Jean Andrés terminaba de declarar ante los medios, aparecía la defensa de Ángel lista para hablar.
En el caso de Pumarol, el juez Rigoberto Sena, del Juzgado de Atención Permanente del Distrito Nacional, le dictó tres meses de prisión preventiva que serán cumplidos en la cárcel de Anamuya en Higüey.
Esta medida coercitiva es por el ataque que perpetró en Naco el pasado miércoles, que dejó a una mujer fallecida y a otras cinco personas heridas.
El abogado de Pumarol, Richard Martínez, detalló las razones por las que el juez envió a su cliente a cumplir prisión preventiva en la cárcel de Anamuya en Higüey.
Según Martínez, la Fiscalía solicitó que se enviara a Jean Andrés Pumarol a dicho recinto, argumentando que cuenta con un pabellón psiquiátrico. Ante esto, resaltó que esa petición reconoce indirectamente la condición de salud mental del imputado.
“De una forma u otra reconoce que existe un diagnóstico médico en cuanto a la salud mental del imputado”, dijo.
El abogado manifestó que su cliente debe recibir tratamiento en un centro de salud mental privado, y no en la cárcel de Anamuya.
Conforme a informes médicos, el joven de 30 años padece esquizofrenia de tipo paranoide desde el año 2017 y por esto, el abogado agregó que considera que la cárcel de Anamuya “no es el lugar apropiado”.
Entretanto, en el otro extremo de la Fiscalía, vociferando “¡Libertad!”, el comunicador Ángel Martínez subió las escaleras hacia la carcelita del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, luego de que fuera aplazada la audiencia de conocimiento de habeas corpus interpuesta a su favor.
El abogado que representa a Martínez, Carlos Mesa, explicó los motivos del aplazamiento, que será retomado el próximo miércoles.
Con total certeza, aclaró en dos ocasiones que la jueza de la cuarta sala decidió posponer la audiencia porque “supuestamente” no fue convocada debidamente la ministra de Interior y Policía, Faride Raful, y el juez Raimundo Mejía.
Mesa alegó que esta decisión fue tomada “para preservar el derecho de defensa a ese compañero suyo”, refiriéndose a Raimundo Mejía.
Sin embargo, el abogado expresó su desacuerdo con la decisión, argumentando que el proceso podía continuar sin la presencia de todos los convocados.
“Nosotros estábamos en condiciones de hasta desistir en cuanto a la ministra y al juez”.
También, el letrado señaló que Martínez ha sido víctima de una “retención irregular” durante varios días que ha afectado su salud.
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