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Luego de que decenas de legisladores demócratas abandonaran el estado, la cámara baja — de mayoría republicana — no logró el quórum requerido para poder sesionar. El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha amenazado con destituir a algunos miembros de la oposición.
Legisladores demócratas de Texas impidieron el lunes que la Cámara de Representantes de su estado avanzara, al menos por ahora, con la petición del expresidente Donald Trump para rediseñar los mapas electorales con el fin de mejorar las perspectivas republicanas en las elecciones de mitad de período de 2026, a medida que su posición política se debilita.
Después de que decenas de legisladores demócratas salieran del estado, la cámara baja — de mayoría republicana — no pudo alcanzar el quórum requerido para llevar a cabo sus actividades. El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha amenazado con destituir a algunos miembros de la oposición.
Los demócratas han respondido que es una “cortina de humo” de Abbott para establecer una autoridad legal que no posee.
La Cámara de Representantes emitió órdenes de arresto civil con el objetivo de obligar el retorno de sus miembros ausentes, pero de momento no se sabe si se pueden ejecutar fuera de Texas.
El presidente de la Cámara de Representantes estatal, Dustin Burrows, instó a los demócratas a volver para “cumplir con su deber”.
“Si continúan por este camino, habrá consecuencias”, afirmó.
La revuelta demócrata y las amenazas de Abbott intensificaron una disputa creciente sobre los mapas del Congreso que inició en Texas, pero se extendió para incluir a gobernadores demócratas que han considerado la posibilidad de rediseñar sus propios mapas estatales en respuesta, incluso si sus opciones son limitadas.
La disputa también ofrece un nuevo ejemplo de la agresiva visión de Trump sobre el poder presidencial y su control sobre el Partido Republicano a nivel nacional, al mismo tiempo que se pone a prueba el equilibrio de poderes entre el gobierno federal y los estados.
El creciente estancamiento se centra en la esperanza de Trump de obtener cinco escaños de tendencia republicana en Texas de cara a las elecciones de mitad de período de 2026. Esto aumentaría las posibilidades de que su partido conserve su ajustada mayoría en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, luego de que los republicanos no pudieran lograrlo en los comicios legislativos de 2018, durante el primer mandato de Trump. En la actualidad, los republicanos tienen 25 de los 38 escaños de Texas.
En declaraciones a Fox News, Abbott prácticamente reconoció el lunes la maniobra partidista, al señalar que la Corte Suprema federal ha determinado que “no hay nada ilegal” en rediseñar los distritos para favorecer a un partido mayoritario. Incluso admitió abiertamente que se trata de manipulación de distritos, antes de corregirse a sí mismo para decir que Texas está “trazando líneas”.
A unos 2,900 kilómetros (1,800 millas) de Austin, la gobernadora de Nueva York Kathy Hochul apareció con demócratas de Texas y argumentó que su causa debía ser nacional.
“No vamos a tolerar que un grupo de vaqueros que violan la ley se roben nuestra democracia”, dijo Hochul el lunes, acompañada por varios de los legisladores que salieron de Texas. “Si los republicanos están dispuestos a reescribir las reglas para obtener una ventaja, entonces no nos dejan otra opción: debemos hacer lo mismo. Hay que combatir fuego con fuego”.
Demócratas de Texas afirman que esto es “a largo plazo”.
Antes de la sesión programada, Abbott insistió en que los legisladores habían “huido”, por lo que violaron los deberes que juraron al estado.
“Creo que han perdido sus escaños en la Legislatura estatal porque no están haciendo el trabajo para el que fueron elegidos”, dijo en la entrevista con Fox News, utilizando el característico machismo de su estado para llamar a los legisladores “no texanos”.
“Los texanos no huyen de una pelea”, dijo.
Los demócratas dijeron que no planean ceder pronto a las exigencias del gobernador para regresar al estado.
“No posee ningún mecanismo legal”, dijo la representante estatal Jolanda Jones, una de las legisladoras que estuvo el lunes en Nueva York. “Las citaciones de Texas no funcionan en Nueva York, así que no puede venir por nosotros. Las citaciones en Texas no funcionan en Chicago. … Son cortinas de humo”.
La negativa de los legisladores de Texas a presentarse es una violación civil de las normas legislativas. En cuanto a su amenaza de destituir a los legisladores, Abbott citó una opinión legal no vinculante que emitió el fiscal general estatal, el republicano Ken Paxton, sobre una disputa de quórum en 2021. Paxton sugirió que un tribunal podría determinar que un legislador había perdido su cargo.
Paxton, quien busca un escaño en el Senado federal, señaló en la red social X que los demócratas que “intentan huir como cobardes deben ser localizados, arrestados y llevados de vuelta al Capitolio de inmediato”.
El estado de la votación
Los legisladores que salieron del estado se negaron a decir cuánto tiempo permanecerán ausentes.
“Lo bueno de una ruptura de quórum es que nunca informas por cuánto tiempo lo vas a hacer o qué vas a hacer”, dijo el representante Trey Martinez Fischer, quien ha sido miembro de la cámara baja desde 2001. “Cuando abordamos el avión, reconocimos que estamos en esto a largo plazo”.
El líder de la bancada demócrata en la cámara baja de Texas, Gene Wu, dijo que sus miembros “harán lo que sea necesario”, pero agregó: “No sabemos cómo será eso”.
Las retiradas legislativas solo suelen demorar la aprobación de un proyecto de ley, incluso en 2021, cuando muchos de los mismos demócratas de la cámara baja de Texas salieron del estado durante 38 días en protesta contra las nuevas restricciones de votación. Una vez que volvieron, los republicanos aprobaron dicha medida.
Los legisladores no pueden aprobar proyectos de ley en la Cámara de Representantes de Texas sin que haya al menos dos tercios de los 150 miembros presentes. Los demócratas tienen 62 escaños, y al menos 51 abandonaron el estado, declaró Josh Rush Nisenson, portavoz de la bancada demócrata.
La Corte Suprema del estado sostuvo en 2021 que los líderes de la Cámara de Representantes tenían la autoridad para “obligar la asistencia física” de los miembros ausentes, pero ningún demócrata fue llevado por la fuerza de vuelta al estado después de que se emitieron órdenes. Los republicanos respondieron mediante la imposición de multas diarias de 500 dólares para los legisladores que no se presenten a trabajar.
Mientras tanto, el gobernador sigue haciendo afirmaciones infundadas de que algunos legisladores han cometido delitos graves al solicitar dinero para pagar las multas a las que podrían ser sujetos por salir del estado para negar un quórum.
Ayuda por desastres y política presidencial son parte de los argumentos.
La falta de quórum retrasará las votaciones relacionadas con la asistencia para desastres y los nuevos sistemas de alerta tras las catastróficas inundaciones que azotaron a Texas el mes pasado y cobraron la vida de al menos 136 personas. Los demócratas habían pedido votaciones sobre la respuesta a las inundaciones antes de abordar la redistribución de distritos y han criticado a los republicanos por no hacerlo.
En Fox, Abbott intentó poner ese problema nuevamente en manos de los demócratas, insinuando que sus esfuerzos por romper el quórum se convertirían en el motivo de un retraso en la respuesta a las inundaciones.
Los demócratas de otros estados quieren aprovechar el momento.
El gobernador de Illinois JB Pritzker, un posible aspirante presidencial en 2028 y un conocido detractor de Trump, dio la bienvenida a los demócratas de Texas el domingo, después de varias semanas de conversaciones discretas. Pritzker y el gobernador de California, Gavin Newsom, otro posible aspirante presidencial en 2028, realizaron eventos públicos en los que discutieron la disputa en Texas antes de la ruptura del quórum.
“Esto no se trata solo de manipular el sistema en Texas”, declaró Pritzker el domingo por la noche. “Se trata de manipular el sistema contra los derechos de todos los estadounidenses en los próximos años”.
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