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MADRID (Portaltic/EP) – Apple demandó a un ex empleado del equipo del Apple Watch, quien dejó su puesto en la compañía para unirse al equipo de Oppo, por el robo de secretos comerciales relacionados con su reloj, con el fin de proporcionárselos a la empresa china.
El ex trabajador de los de Cupertino, Chen Shi, se unió en abril de 2025 a Oppo, concretamente al equipo de dispositivos portátiles de la marca, pero no fue hasta junio cuando redactó una carta de oferta donde anunciaba su intención de unirse a la compañía china y, posteriormente, comunicó a Apple que el 27 de junio sería su último día en la empresa.
Shi no reveló que Oppo sería su nueva empresa, y mintió a sus compañeros al decir que volvía a China para “cuidar a sus padres mayores”, a la vez que afirmaba que no tenía intención de buscar un nuevo empleo, según se constató en la demanda.
De esta manera, Apple demandó a este ex empleado por haber recopilado información “altamente confidencial” sobre el Apple Watch en las semanas previas a su partida, para ayudar a Oppo a desarrollar su propio dispositivo portátil.
Sin revelar su futuro empleo en un competidor directo, tal y como se indica en la demanda, Shi organizó y asistió a docenas de reuniones individuales con miembros del equipo técnico del Apple Watch para conocer sus esfuerzos de investigación y desarrollo en curso, incluyendo trabajos en sensores ópticos, de temperatura y de electrocardiograma (ECG).
Igualmente, recopiló documentos confidenciales de la compañía liderada por Tim Cook que detallan aspectos clave de sus tecnologías de detección de salud, para el beneficio de Oppo. Además, Apple sostiene que tres días antes de abandonar la empresa, descargó 63 documentos de una carpeta Box protegida y los transfirió a una unidad USB.
Los de Cupertino también aseguraron que, en medio de la descarga de información, buscó: “¿Alguien puede ver si he abierto un archivo en una unidad compartida?”, y han probado que Oppo estaba al tanto de esto, dado que Shi informó al vicepresidente de Salud de Oppo, Zijing Zeng, de estas acciones en un mensaje el 4 de junio.
Actualmente, según unos mensajes que Shi dejó en su iPhone de trabajo, el demandado trabaja en la oficina de Oppo en Estados Unidos, donde dirige un equipo que desarrolla tecnología de detección. En Apple, trabajó como arquitecto de sistemas de sensores.
Por su parte, en declaraciones a The Verge, el portavoz y jefe del equipo regional de Asuntos Legales de Oppo, Frank Fan, aseguró que no han encontrado ninguna prueba que establezca una conexión entre las acusaciones y la conducta del empleado durante su empleo en Oppo.
“Oppo respeta los secretos comerciales de todas las empresas, incluida Apple, y no se ha apropiado indebidamente de ellos. Oppo cooperará activamente con el proceso legal y confiamos en que un proceso judicial justo aclarará los hechos”, manifestó Fan.














