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Iga Swiatek intenta emular una hazaña que ninguna otra tenista femenina logra desde Serena Williams en 2012: ganar el US Open y Wimbledon en la misma temporada.Jannik Sinner, por su parte, busca algo que ningún hombre ha logrado desde Roger Federer en 2008: revalidar el título del US Open.Según lo visto el martes en el Estadio Arthur Ashe, al concluir la primera ronda, que ya se extiende por tres días, los dos jugadores que reinaron en el All England Club el mes pasado — y que cumplieron breves sanciones por dopaje el año pasado — parecen listos para competir nuevamente en Nueva York. Y con creces.Swiatek, segunda cabeza de serie, arrasó en la cancha principal del US Open y necesitó apenas una hora para vencer a la colombiana Emiliana Arango por 6-1 y 6-2. Sinner, número 1, solo necesitó 39 minutos más para sellar su victoria por 6-1, 6-1 y 6-2 sobre Vit Kopriva, de la República Checa.”Obviamente, cada año es distinto”, comentó Sinner, luciendo la manga blanca que comenzó a usar tras lesionarse el codo en una caída durante Wimbledon. “Uno llega aquí comenzando este torneo, ojalá, de la mejor manera posible, como fue mi caso”.Lee: Guardianes colocan a Carlos Santana en waivers absolutosCiertamente no mostró rastros del virus que lo obligó a retirarse en el primer set de la final del Abierto de Cincinnati contra su mayor rival, el número 2 Carlos Alcaraz, la semana pasada.Tanto Sinner como Alcaraz, que han ganado los últimos siete títulos importantes, podrían liderar el ranking ATP después de estos 15 días. De la misma forma, Swiatek, Coco Gauff o la número 1 Aryna Sabalenka, la actual campeona, podrían partir de Nueva York en la cima de la WTA.El martes, Sinner salvó los dos puntos de quiebre que enfrentó y ganó 33 de los 40 puntos con su primer servicio.Swiatek fue aún más contundente: no solo nunca enfrentó un punto de quiebre, sino que ni siquiera fue llevada al deuce en ninguno de sus ocho juegos de servicio, mientras acumulaba una ventaja de 26-5 en ganadores.Hubo un tiempo en que algunos, tal vez influenciados por el dominio de Swiatek en la arcilla roja del Abierto de Francia, pensaban que no podría triunfar en superficies más rápidas como la hierba y el asfalto. Sin duda, eso no ocurrió, como lo demuestran sus campeonatos en Wimbledon en julio y en el Abierto de Estados Unidos de 2022.
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