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Venecia.- Dwayne ‘La Roca’ Johnson, actor muy popular conocido por sus éxitos de taquilla, llevaba un tiempo cuestionándose si podía dar más. Lo descubrió con su rol en ‘The Smashing Machine’, dirigida por Benny Safdie, presentada este viernes en el certamen de Venecia.
“Tenía una voz interior, un deseo muy fuerte, de explorar mis límites porque a veces no sabes de qué eres capaz cuando te etiquetan” hasta que “gente que te aprecia y respeta, como Emily (Blunt) y Benny, te dicen: ‘puedes lograr algo diferente'”, explicó el actor en una conferencia de prensa en Venecia.
Y es que, reflexionó, “en Hollywood todo se centra en la taquilla” y aunque reconoce que disfrutó haciendo las películas que lo convirtieron en la estrella que es hoy, hace años se preguntaba si estaba viviendo sus sueños o los de otros. “Ahora vivo mis sueños y hago lo que me gusta”, afirmó.
Se refería a su papel en ‘The Sashing Machine’, donde interpreta a una estrella de lucha libre de los noventa, Mike Kerr, en una época en la que esta disciplina no tenía la popularidad ni la importancia actual.
Johnson se hizo famoso en el wrestling al final de esa época, antes de saltar a la actuación. Conoció a Kerr cuando él comenzaba -“era un ídolo para todos nosotros”-.
Sin embargo, la película no trata solo sobre la lucha, aunque sea un elemento clave. “En realidad es una historia de amor entre Mark y Dawn (interpretada por Blunt) y de Mark con la lucha” y sobre la suerte de vivir y la evolución de una relación.
Johnson, que proviene de una familia de luchadores profesionales, deseaba participar en esa faceta más personal.
“Sé lo que es ver a la mujer que amas sacrificar su propia vida y sueños, por un Mark o por mi padre. Eso es lo que Emily representa en la película. Usualmente no se habla de las mujeres y novias en ese mundo”, apuntó el actor.
También habló conmovido de su padre, luchador y en su infancia, una persona sin hogar. A pesar de todo, “su capacidad de amar fue inmensa” y eso lo inspiró para interpretar a Kerr, a quien describió como “sensible y afable”.
Por su parte, Blunt destacó la importancia de lo que sucedía detrás del éxito del luchador, lo que implica estar con un hombre que se dedica a ese deporte.
Para preparar su personaje, se reunió con Dawn, “que fue muy generosa con su historia, conmigo, con el contexto de aquella época, los arrepentimientos, los arranques de ira, la naturaleza de la relación y el profundo amor y devoción que se tenían el uno al otro en un entorno imposible”.
Un papel muy diferente a cualquier otro que haya interpretado antes, reconoció, ya que le brindaba un “panorama más completo de lo que realmente es una relación”, incluyendo los altibajos.
“Fue emocionante trabajar con la forma visceral de filmar de Benny, tan espontánea”, añadió la actriz.
El mundo de la lucha en esa época, atrajo al director por sus contrastes. “Todas las artes marciales competían, pero era una comunidad pequeña y cerrada, se conocían y se querían, había mucha conexión entre ellos, lo que era una contradicción con el mundo de la lucha, algo que quería explorar”.
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