Entretenimiento

Cuando una padece, el dolor pertenece a todas

8857368473.png
Así, la justicia y unos defensores ineficaces nos juzgan, infligiéndonos aún más sufrimiento.

Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.

Redacto estas palabras con el corazón apesadumbrado. Las informaciones siguen resultando terribles para las mujeres de la República Dominicana: a los dos casos de violaciones en serie que ignorábamos al redactar la semana anterior se añaden tres asesinatos, dos supuestas violaciones cometidas por un sacerdote y un penado por incesto que será liberado de la prisión para ejercer como docente en la Escuela Nacional del Colegio de Abogados (CARD), pese a haber cumplido solo siete de los 20 años de pena que le correspondían.

Puede leer: La decadencia nos circunda por doquier

El jueves anterior, pocas horas después de conocer que tres agentes de la Policía y un integrante de la Armada fueron acusados de asaltar y violar a una mujer haitiana que habían interceptado mientras viajaba en taxi, nos informaron que una joven se arrojó desde un tercer piso – supuestamente bajo los efectos de alguna droga – temiendo ser violada por cinco hombres. Además está el caso del padre Alejandro Alnselmo Sánchez, denunciado por abusar sexualmente de dos hermanas cuando ambas tenían 12 años, así como el asesinato de Valdemira Peña Mateo (59) y los feminicidios de Maite Gerónimo de la Cruz (16) y Katherine Frías Aquino (20).

Otro atentado es que Dionni Santana quede en situación de semi libertad sin haber cumplido ni la mitad de su condena, pese a haber violado a su hijastra desde los 11 hasta los 14 años. Así, la justicia y unos defensores ineficaces nos juzgan, infligiéndonos aún más sufrimiento.

TRA Digital

GRATIS
VER