Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
Cádiz (1973) – Redactor y editor especializado en tecnología. Escribe de forma profesional desde 2017 para medios de difusión y blogs en español.
España ocupa el décimo puesto en el ranking mundial de conocimientos sobre ciberseguridad y privacidad online, según el último estudio de NordVPN. En 2024, nuestro país estaba en la octava posición, lo que indica un retroceso y pone de manifiesto la escasa concienciación de los usuarios sobre la importancia de proteger sus datos en internet. La encuesta revela tanto aspectos positivos como negativos: los españoles sobresalen en la creación de contraseñas seguras, pero fallan de manera marcada en la detección de riesgos vinculados a la inteligencia artificial.
**Ciberseguridad en España: puntos fuertes y debilidades**
El estudio muestra que el 96 % de los encuestados en España sabe generar contraseñas robustas y el 90 % tiene claro qué información compartir con las aplicaciones que utiliza. Además, un 89 % reconoce cuándo un servicio de streaming resulta sospechoso, lo que supone una mejora respecto a años anteriores. Sin embargo, el informe deja al descubierto importantes carencias en áreas clave de privacidad digital: solo el 6 % es capaz de identificar los riesgos de la IA aplicada al trabajo, apenas un 11 % sabe proteger su red Wi‑Fi doméstica y solo un 26 % detecta páginas de phishing.
**Países líderes en ciberseguridad**
Mientras España pierde posiciones, otras naciones registran avances notables. Lituania encabeza la clasificación con 62 puntos sobre 100, seguida de Singapur e India con 61, y de Polonia y Finlandia con 60. Estos resultados sitúan a España por detrás de países que han invertido en campañas de concienciación digital y en educación en seguridad online, logrando que la población adopte mejores hábitos.
Uno de los aspectos más alarmantes es el desconocimiento generalizado de los riesgos que la IA implica en el entorno laboral. Muchos usuarios no perciben que estas herramientas pueden recopilar datos sensibles, facilitar el espionaje corporativo o abrir la puerta a fraudes cada vez más sofisticados. La falta de preparación en este ámbito deja a trabajadores y empresas vulnerables frente a ciberamenazas que evolucionan rápidamente.
**Un perfil con margen de mejora**
El informe categoriza a los usuarios en distintos perfiles: un 4 % son “ciberviajeros”, con conocimientos mínimos; un 56 % son “ciberaventureros”, con nociones intermedias; y apenas un 7 % llegan a la categoría de “ciberestrellas”, es decir, usuarios con gran dominio en privacidad y ciberseguridad. Esta última cifra sigue por debajo de la media mundial, que se sitúa en el 10 %.
**Medidas básicas para estar más seguros**
Los expertos recuerdan que mejorar la seguridad digital está al alcance de cualquiera. Recomendaciones como crear contraseñas únicas y bien elaboradas, activar la autenticación multifactor, mantener los dispositivos actualizados, usar una VPN, revisar con frecuencia la configuración de privacidad en redes sociales y aplicaciones, y mantenerse informado sobre nuevas amenazas, son pasos esenciales para reducir riesgos.
**Avances y retrocesos**
A pesar del descenso en el ranking global, los españoles han mostrado cierta evolución positiva en algunos aspectos: el reconocimiento de estafas impulsadas por IA ha subido al 57 % y la concienciación sobre herramientas de privacidad online ha alcanzado el 25 %. No obstante, la capacidad para detectar URLs falsas ha caído al 31 %, lo que indica que las mejoras son dispares y que aún queda camino por recorrer.
**La importancia de la educación digital**
La Prueba Nacional de Privacidad, que ha recopilado más de 30 000 respuestas en 186 países, subraya la necesidad de reforzar la educación digital. Entender cómo proteger la información personal en internet no solo es una cuestión individual, sino una responsabilidad colectiva que afecta la seguridad de empresas, instituciones y la sociedad en general.
**España, en busca de recuperar posiciones**
España aún dispone de amplio margen de mejora para volver a escalar en este ranking mundial de ciberseguridad. Con campañas de sensibilización, inversión en formación digital y una mayor cultura de la ciberseguridad, podría evitar que descuidos básicos sigan deteriorando su imagen y, lo más importante, proteger mejor a los ciudadanos frente a los riesgos que plantea la vida digital.
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