Primera Plana Tecnologia

#SinFiltro: De Freddy a Alofoke, el reflejo de nuestra comunicación

8873021482.png
Freddy lo hace desde la responsabilidad y el vínculo familiar; Alofoke, desde la inmediatez y la interacción digital.

Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.

En la República Dominicana, los medios de comunicación siempre han contado con figuras que van más allá de informar o entretener: son un espejo de nuestra identidad a lo largo de los tiempos.

Dos nombres aparecen con frecuencia en estas charlas: Freddy Beras Goico y Santiago Matías, más conocido como Alofoke. Aunque difieren en estilo, formato y generación, ambos capturan el pulso de la sociedad y evidencian la transformación en la forma de consumir información y ocio.

Freddy Beras Goico fue, durante décadas, una de las voces más reconocidas de la televisión dominicana. Desde *El Gordo de la Semana* hasta *Punto Final*, dejó un legado que mezclaba humor, sátira y sensibilidad social.

Sus programas ofrecían risas y reflexión, emoción y crítica, creando un espacio donde el entretenimiento se encontraba con la responsabilidad social. A través de campañas, telemaratones y una relación cercana con su público, Freddy transformó la pantalla en un punto de encuentro familiar y comunitario, donde la comunicación transmitía valores y cohesionaba a la sociedad.

En contraste con la televisión de entonces, el ecosistema digital de Santiago Matías, Alofoke, muestra otra manera de conectar con la audiencia. Su plataforma, Alofoke Radio Show, es un punto de reunión masivo que combina música urbana, conversación y participación activa.

Su estilo directo y ágil captura la atención de una generación joven que consume información desde el móvil y redes sociales, generando interacción constante. Alofoke ha demostrado cómo los medios digitales pueden abrir espacios para voces antes ausentes en los canales tradicionales, transformando la forma en que se construye el discurso público.

La comparación entre ambos no pretende decidir quién es mejor. Se trata de comprender qué representan en sus respectivos contextos. Freddy refleja una época donde la televisión era la principal fuente de información y entretenimiento, donde el humor podía educar y la pantalla se convertía en extensión de la familia.

Alofoke encarna la era digital: contenidos inmediatos, interacción permanente y diversidad de voces. Su éxito se mide por la capacidad de generar conversación y atención en tiempo real, demostrando que la comunicación también puede ser un fenómeno de participación colectiva.

Lo fascinante es que ambos logran conectar con la audiencia. Freddy lo hace desde la responsabilidad y el vínculo familiar; Alofoke, desde la inmediatez y la interacción digital. Cada uno, en su tiempo, refleja cómo la sociedad se comunica, qué espera de los medios y cómo se identifica con ellos. La evolución de uno al otro muestra que nuestra relación con la información no es estática: ha pasado de ser más pausada y reflexiva a ser más veloz, cruda y participativa.

Al final, ni Freddy ni Alofoke existen sin su público. Los medios y quienes los lideran no solo informan; representan y dialogan con la sociedad. Y en ese espejo descubrimos la verdadera historia de nuestra comunicación: un recorrido que refleja cambios culturales, tecnológicos y sociales, y que nos recuerda que cada generación encuentra sus propias formas de conectar, aprender y compartir.

TRA Digital

GRATIS
VER