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El mánager de Cleveland, Steven Vogt, expresó su enorme entusiasmo al confirmar que la serie de tres partidos contra Detroit se disputará en casa.
Fue un fin de semana casi ideal para los Guardians, aunque el domingo se presentó como una oportunidad perdida para intensificar aún más la lucha por la División Central de la Liga Americana.
La pérdida por 6-2 ante los Twins en Target Field rompió la racha de 10 victorias consecutivas de Cleveland y cerró una gira que había terminado con un récord de 6-1. Desde el 29 de agosto, ostentan un 18-6 y han triunfado en 15 de sus últimos 17 encuentros. Sin embargo, en varios aspectos, su labor apenas comienza.
El escenario está preparado para una emocionante serie de tres juegos entre los Tigers y los Guardians, que arranca la noche del martes en Progressive Field.
Cleveland logró acortar una diferencia de 15.5 juegos respecto al líder para acercarse a un juego de Detroit, quien llegó al fin de semana con una ventaja de 3.5 juegos antes de ser barrido en casa por Atlanta. Los Guardians también llevan ventaja de 6-4 en la serie directa, lo que será determinante si ambos equipos terminan con idéntico registro.
Ese revés colocó momentáneamente a Cleveland medio juego detrás de los Astros por el último puesto de comodín, posición que el club recuperó cuando Houston cayó ante Seattle más tarde ese domingo por la noche.
“No podríamos estar más emocionados de volver a la casa”, declaró el mánager Steven Vogt. “Sé que es noche de escuela, sé que la gente trabaja, pero necesitamos a nuestra afición. Necesitamos llenar el Progressive… Los muchachos están listos. Sabemos lo que está en juego, y será una semana muy divertida”.
El plantel de Vogt le restó 9.5 juegos a los Tigers en los últimos 24 días, gracias a un grupo de jugadores que prefirieron pelear hasta el final en lugar de rendirse ante un panorama sombrío.
“Creo que en el último mes, muchos podrían haber dicho que estábamos fuera de la contienda”, señaló el jardinero Steven Kwan, quien abrió el domingo con su 11.º jonrón de la temporada. “Tal vez algunos hubieran comenzado a revisar sus estadísticas y a pensar en una temporada muerta. Pero hemos estado jugando un béisbol sin egos, esforzándonos juntos, manteniéndonos unidos. Ha sido muy divertido, y tenemos una semana apasionante por delante”.
El pitcheo ha sido crucial para los Guardians recientemente, sobre todo la rotación de abridores. Joey Cantillo permitió una carrera en 4.1 innings el domingo, extendiendo el récord de la franquicia a 17 juegos consecutivos en los que los lanzadores titulares han cedido dos carreras o menos. Eso incluye la blanqueada del sábado en la doble cartelera, cuando Slade Cecconi y Logan Allen combinaron 15 entradas sin permitir carreras.
La racha de entradas sin conceder anotaciones alcanzó 23 antes de que los Twins anotaran por primera vez en la tercera entrada del domingo.
Aun así, considerando lo lejos que han llegado los Guardians, el terreno que han recuperado y el emocionante desenlace que aún se avecina, una derrota no empaña lo logrado ni lo aprendido a lo largo del camino.
“No podría estar más orgulloso de este grupo: 24 juegos en 24 días, y haber alcanzado una posición que nos brinda una oportunidad real de llegar a la postemporada”, reiteró Vogt. “Eso es todo lo que se puede pedir. Evidentemente, terminar con una nota como la de hoy puede desanimar, pero no apagará a este grupo. Estaremos listos para el martes”.
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