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Tal vez la rivalidad entre los Yankees y los Medias Rojas haya perdido algo de vigor en los últimos años, pero la atracción de un enfrentamiento Nueva York‑Boston para iniciar los playoffs sigue completa.
Los Medias Rojas irán a los Yankees a partir del martes en una serie de comodines al mejor de tres partidos. Cada juego se disputará en el Yankee Stadium, y el primero contará con un duelo de lanzadores zurdos: Max Fried (19‑5) por Nueva York contra Garrett Crochet (18‑5) de Boston.
En el Bronx hay ansias de ajustar cuentas. Los Yankees no le ganan a los Medias Rojas desde 2003, cuando Aaron Boone — el actual líder de Nueva York — conectó un jonrón en entradas extras contra Tim Wakefield, dejando a Boston sin posibilidades en el decisivo séptimo juego de la Serie de Campeón de la Liga Americana.
Nadie olvida que los Medias Rojas se vengaron en la Serie de Campeón de 2004, remontando tras perder los tres primeros juegos, y sumaron victorias en una serie divisional de 2018 y en el juego de comodines de 2021.
“Es Nueva York contra Boston”, declaró Alex Cora, el manager de los Medias Rojas. “Va a ser algo enorme”.
Durante la temporada regular, Boston dominó 9‑4 a los Yankees en la serie particular, incluido un 5‑2 en el Bronx.
“Yankees‑Boston es una serie increíble en cualquier momento del año y ahora aún más”, comentó Carlos Narváez, el catcher venezolano de los Medias Rojas.
Crochet ha brillado contra Nueva York, con una hoja de 3‑0 y una efectividad de 3.29, acumulando 30 ponches y cuatro bases por bolas en 27⅓ entradas.
“Uno de los mejores del juego, obviamente, y ha tenido una temporada fenomenal”, resaltó Boone. “Lo hemos visto varias veces. Ha tenido éxito contra nosotros. También le hemos puesto algunos límites, y con suerte esa familiaridad nos será útil el martes”.
Los tres partidos se jugarán por la noche, y es probable que el Yankee Stadium esté caldeado.
“Tenemos una multitud ruidosa allí, un grupo que nos ha alentado todo el año”, dijo Aaron Judge, quien redondeó otra campaña colosal al liderar la liga con un promedio de .331, además de 53 jonrones y 114 carreras impulsadas. “Incluso en nuestros momentos difíciles del verano, siguieron apoyándonos, así que seguramente estarán entusiasmados por un choque Yankees‑Medias Rojas en la postemporada”.
El vencedor avanza a una serie divisional que arrancará en Toronto el próximo fin de semana.
Boston llegó a una marca de 30‑35 a finales de mayo antes de enderezar el rumbo con una racha de seis victorias consecutivas, que incluyó una barrida de tres juegos en el Bronx. Los Medias Rojas cerraron la temporada regular con una hoja de 59‑38 después del mal arranque.
Carlos Rodón (18‑9) abrirá el segundo duelo para los Yankees y el novato Cam Schlittler (4‑3) podría lanzar el posible tercer partido. Boston pondrá al dominicano Brayan Bello (11‑9) en el segundo juego y tendrá que elegir entre los zurdos Connelly Early y Kyle Harrison tras descartar al derecho Lucas Giolito por una lesión en el codo.
Nueva York comenzó la campaña 35‑20, sufrió una caída a 25‑34 y luego cerró con 34‑14.
“Simplemente empezamos a juntarnos y darnos cuenta de nuestro potencial como grupo. Creo que el bullpen se estabilizó un poco”, comentó Boone. “Cerramos bien, algo que nos sirvió para mantenernos afilados y realmente concentrados”.
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