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CEUTA, 14 de octubre (EUROPA PRESS) – El perímetro fronterizo de Ceuta sigue bajo un esquema de vigilancia reforzado, con presencia permanente de fuerzas terrestres, navales y aéreas tanto del lado español como del marroquí. El despliegue se debe al aumento de la presión migratoria provocado por las inclemencias del tiempo y a una convocatoria difundida en redes sociales que invita a concentrarse el 15 de octubre en los alrededores del paso fronterizo para intentar un cruce masivo hacia territorio español.
Fuentes de seguridad consultadas confirman que la alerta se activó a principios de semana y que los controles se han incrementado en las dos bahías donde se ha erigido una doble valla. En la zona marroquí, la gendarmería y las fuerzas auxiliares han intensificado sus patrullas, especialmente en los bosques de Bel Younech y Fnideq, tradicionalmente usados como focos de concentración de migrantes.
Este martes también se avistó un helicóptero de la Gendarmería Real marroquí, que realizaba inspecciones en los bosques cercanos a la frontera, donde la actividad militar ha aumentado de forma visible. En las últimas noches, la Guardia Civil ha mantenido un helicóptero en vuelo continuo sobre las bahías norte y sur de Ceuta, coordinando desde el aire la vigilancia marítima y los movimientos en la zona del espigón.
El llamado al pase masivo se ha estado difundiendo durante semanas a través de Facebook, TikTok y canales de Whatsapp. La situación recuerda a la vivida el 15 de septiembre del año pasado, cuando una convocatoria similar en redes provocó enfrentamientos y carreras en los accesos fronterizos. En esa ocasión, alrededor de 400 personas de origen magrebí y subsahariano se reunieron en áreas próximas al vallado. La tentativa fue neutralizada por la policía marroquí tras dos jornadas de alta tensión, con decenas de arrestos y refuerzos militares desplegados en el perímetro.
Según medios marroquíes como Tanja24, que acceden a información del Ministerio del Interior de Marruecos, el pasado sábado fueron detenidas unas 500 personas que se encontraban en las inmediaciones de antiguos asentamientos improvisados en los montes marroquíes cercanos a Ceuta. Parte de los detenidos habría sido trasladada a otras provincias del norte del país, dentro del habitual procedimiento de dispersión.
