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Chicago. El juez principal del condado de Cook emitió la noche del martes una orden que impide al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) detener a personas en los tribunales.
La detención de residentes fuera de los juzgados es una estrategia habitual de los funcionarios federales, quienes han permanecido apostados fuera de los recintos judiciales del condado durante varias semanas, efectuando arrestos y provocando concentraciones de manifestantes.
La disposición, que pasó a vigorizar este miércoles, prohíbe la aprehensión por infracciones civiles de cualquier “parte, testigo o posible testigo” mientras acude a procesos judiciales. La prohibición abarca detenciones dentro de los juzgados y en los aparcamientos, aceras adyacentes y entradas.
“La gestión neutral de la justicia exige que los tribunales continúen abiertos y accesibles, y que los litigantes y testigos puedan comparecer sin temor a ser arrestados por infracciones de carácter civil”, se lee en la orden.
El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) sostuvo la costumbre de realizar detenciones en los juzgados, calificándola de “sentido común”.
“No somos una monarquía feudal; no existen santuarios legales donde alguien pueda refugiarse y evadir las consecuencias de infringir la ley”, declaró el DHS este miércoles en un comunicado. “Ninguna disposición constitucional impide detener a un infractor dondequiera que se encuentre”.
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