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El Museo del Louvre vuelve a abrir sus puertas luego de un sonado robo: ¿Cuál será el porvenir de la célebre Galería de Apolo?

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El museo fue evacuado cuando ocurrió el asalto, el domingo un poco después de las nueve y media de la mañana.

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El museo fue evacuado cuando ocurrió el asalto, el domingo un poco después de las nueve y media de la mañana. / Fuente externa.

París.- El Museo del Louvre reabrirá sus puertas al público este miércoles, después de haber permanecido cerrado durante tres días a raíz del robo perpetrado en sus instalaciones.

Sin embargo, la emblemática Galería de Apolo, de donde fueron sustraídas ocho joyas de la corona francesa, continuará clausurada por tiempo indefinido, mientras persiste el debate sobre las deficiencias en su sistema de seguridad.

Una discusión que también centrará este miércoles la comparecencia en el Senado de la presidenta del Louvre, Laurence de Cars, en el cargo desde 2021, mientras los investigadores intentan obtener todos los indicios posibles de los rastros y pruebas que dejaron los cuatro integrantes del comando que llevaron a cabo el golpe el domingo pasado en apenas siete minutos.

Tras un asalto valorado económicamente por el Louvre en 88 millones de euros, según declaró a RTL la fiscal de París, Laure Beccuau, el museo más visitado del mundo volverá a recibir al público este miércoles, aunque la Galería de Apolo permanecerá cerrada por “un cierto tiempo”, indicó este martes a EFE una portavoz del centro.

El museo fue desalojado cuando se produjo el robo, el domingo poco después de las nueve y media de la mañana, y a pesar de que el lunes todo estaba dispuesto para recibir visitantes, en el último momento los responsables decidieron aplazar la apertura. El martes es el día de cierre semanal habitual.

Fue en la Galería de Apolo donde penetraron dos de los ladrones, tras ascender a la primera planta donde se ubica gracias a una furgoneta con un montacargas de los utilizados en mudanzas que habían estacionado en el flanco sur del museo, el que da al río Sena, a la vista de todo el mundo.

Una vez ingresaron en la galería tras hacer un agujero en el cristal de una de las puertas del balcón, forzaron con discos de corte dos vitrinas, una con joyas de la época de Napoleón y otra con alhajas de la corona de Francia.

En su huida, perdieron por el camino la corona de la emperatriz Eugenia de Montijo, que además resultó dañada. Toda la operación duró siete minutos.

Más allá del valor monetario de las piedras preciosas de las joyas, este robo “supera incluso al de la Mona Lisa en 1911”, según el historiador Eric Anceau, un especialista en la historia de Francia y de Europa en el siglo XIX, puesto que las piezas sustraídas representan una parte de la historia y del patrimonio francés.

“Más allá del valor económico de los más de 8.700 diamantes, 34 zafiros, 38 esmeraldas y más de 200 perlas robadas, cuyo precio es difícil de cuantificar, es su conjunto lo que le otorga todo su valor, y este es precisamente inestimable ya que las piezas hurtadas representan una porción de la historia de Francia y del legado común de los franceses”, comentó Anceau al diario Le Monde.

Paralelamente al lamento por la pérdida de una parte del patrimonio francés, ha crecido la indignación por la falta de seguridad en el Louvre y otros museos franceses.

La ministra francesa de Cultura, Rachida Dati, se defendió este martes de las críticas sobre posibles fallos en la seguridad en el Museo del Louvre e insistió en que el refuerzo del dispositivo se está llevando a cabo, pero se demora debido a las reglas administrativas.

Hizo hincapié en que Des Cars había solicitado auditorías de seguridad en 2022, 2023 y 2024 que habían arrojado una serie de recomendaciones que “se están implementando”.

Por ejemplo, mencionó la modernización de la videovigilancia, que no existe en todas las salas, y que se está desplegando; la reestructuración de los centros de control de seguridad, con la creación de uno central, y el despliegue de redes de fibra óptica e informática, lo que implica instalar “kilómetros de cable”, y que también es algo que se está realizando.

“Lo que sucedió el domingo no es un incidente trivial. Es un ataque grave a nuestro patrimonio histórico” y también “una herida para todos nosotros” porque el Louvre es “el escaparate de la cultura francesa y de nuestro patrimonio”, señaló Dati en la sesión de control al Gobierno ante la Asamblea Nacional.

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