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Estados Unidos. – Este sábado 8 de noviembre de 2025 marca el segundo día seguido con cifras cercanas al millar de vuelos anulados y miles de trayectos con demoras, debido a la carencia de controladores aéreos ocasionada por la paralización del gobierno federal, que ya suma 39 días.
Según el sitio web de monitoreo Flightaware, ya se han contabilizado mil 8 cancelaciones de vuelos a lo largo del día en EE. UU., siendo los aeropuertos de Charlotte (Carolina del Norte), Newark y John F. Kennedy de Nueva York, el Internacional de Chicago y el de Atlanta los más perjudicados por el momento.
La insuficiencia de controladores también generó más de tres mil 700 vuelos aplazados, con notable impacto en las terminales del área neoyorquina.
Los vuelos con destino al Kennedy sufren una demora promedio superior a dos horas y media, y las salidas se ven afectadas por unos 100 minutos de retraso. Aquellos que aterrizan en Newark experimentan aplazos medios de más de cuatro horas, y en el Aeropuerto LaGuardia, rondan la hora, según reportó CNN.
Las aerolíneas más afectadas por los contratiempos son American Airlines, Southwest, United, Delta y Jetblue.
Durante la jornada del sábado, la Administración Federal de Aviación (FAA) notificó suspensiones temporales de las operaciones en tierra en la terminal de Chicago y en el JFK por la ausencia de personal controlador.
La falta de controladores aéreos ha llevado al Departamento de Transportes a ordenar una reducción de hasta el 10 por ciento en el tráfico aéreo nacional, recortes que podrían escalar al 20 % si el panorama no mejora la semana entrante, de acuerdo con explicaciones del Gobierno.
Los controladores aéreos son personal fundamental, por lo que, aunque no perciban su sueldo, se espera que cumplan con sus obligaciones; no obstante, cerca de dos mil de ellos se han ausentado alegando diversos motivos.
El secretario de Transportes de EE. UU., Sean Duffy, advirtió que la situación empeorará si no se resuelve antes del martes, fecha prevista para un nuevo abono a los controladores que no se efectuará si el gobierno sigue cerrado.
El Senado de Estados Unidos permanece en sesiones durante todo el fin de semana en un esfuerzo por lograr un consenso que ponga fin a este cese de actividades, el más prolongado en la historia del país.
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