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“Comenzamos a arrestar a una parte del grupo que ejecutó este atraco. Las alhajas serán recuperadas, serán aprehendidos, serán sometidos a juicio”, afirmó el mandatario nacional al canal Televisa mientras se encontraba en Ciudad de México, parte de una visita por Latinoamérica.
“Lo ocurrido, que ha impactado a nivel global, representa una ocasión para emerger aún más robustos”, manifestó Macron.
El 19 de octubre, antisociales consiguieron acceder al museo y sustrajeron en breves instantes joyas valuadas en 88 millones de euros. Las piezas aún no aparecen y cuatro presuntos responsables han sido acusados y encarcelados.
Entre las ocho obras “de un valor histórico inmenso”, según las autoridades, figura el tiara de la emperatriz Eugenia, consorte de Napoleón III, que porta cerca de 2.000 diamantes.
El Tribunal de Cuentas galo reprobó esta semana la administración del museo en tiempos recientes, señalando que había dejado de lado la protección en pro de estrategias para atraer mayor concurrencia.
“La protección del Louvre será completamente reconsiderada”, garantizó Macron el viernes, aludiendo al vasto proyecto de modernización del museo revelado en enero, el cual, entre otras cosas, instaurará un acceso diferente y una sala exclusiva para la Mona Lisa de Leonardo da Vinci.
El viernes, la galería de arte más visitada a nivel mundial introdujo “acciones inmediatas” tales como la designación de un “encargado de seguridad” y la instalación de más dispositivos de vigilancia.
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