Estados Unidos.- Dos integrantes de la Guardia Nacional de EE. UU. se hallaban este jueves en estado de extrema gravedad tras ser baleados el miércoles en Washington, cerca de la Casa Blanca, por un ciudadano afgano que llegó al país en 2021.
El presidente Donald Trump tachó lo sucedido de “acto terrorista” y prometió endurecer sus directrices antiinmigración. Además, responsabilizó al gobierno de su antecesor, Joe Biden, por permitir el ingreso sin control de afganos cuando los talibanes tomaron el poder.
El presunto autor del ataque, que dejó heridos a ambos militares y al propio agresor, es un afgano que colaboró con tropas de Washington en Afganistán, siendo evacuado en 2021 gracias a una operación organizada por Biden para apoyar a aquellos que cooperaron con los estadounidenses, según informes locales.
Trump aseguró que “revisará” el expediente de “todo extranjero que haya entrado” al país procedente de Afganistán bajo la administración Biden.
El vicepresidente, J.D. Vance, también manifestó su rechazo a la acogida de afganos tras la salida de Washington de Afganistán.
” Recuerdo que en 2021 expresé mi desacuerdo con la política de Biden de recibir masivamente y sin filtros a refugiados afganos. En aquel momento, algunos colegas me tildaron de racista. Fue una revelación. No debieron haber estado en nuestro territorio”, escribió Vance en X.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, confirmó que el hombre fue aceptado en Estados Unidos en septiembre de 2021, un mes después de la apresurada retirada de las fuerzas estadounidenses de Afganistán.
Medios estadounidenses lo identificaron como Rahmanullah Lakanwal, de 29 años.
Los disparos ocurrieron el miércoles por la tarde en una zona de oficinas a dos cuadras de la Casa Blanca, en el corazón de Washington, donde cientos de efectivos de la Guardia Nacional están patrullando desde agosto por disposición de Trump, un despliegue que fue cuestionado por la oposición demócrata.
Los dos uniformados se encuentran “mutilados seriamente” y el presunto atacante también resultó “gravemente afectado”, informó Trump en su plataforma Truth Social, donde calificó al autor de “bestia” y aseguró que “pagará un alto precio”.
Desde Florida, donde celebra el Día de Acción de Gracias, Trump atacó la inmigración, a la que considera “el mayor peligro para la seguridad nacional”.
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS), la entidad federal encargada de la migración legal, anunció poco después la paralización del trámite de “toda solicitud migratoria referente a ciudadanos afganos”, mientras se evalúan los protocolos.
Shawn VanDriver, presidente de AfghanEvac, una organización que facilitó la reubicación de afganos en Estados Unidos, recalcó que “el suceso aislado y brutal de este individuo no debe usarse como pretexto para juzgar o menospreciar a toda una comunidad”.
Jeffery Carroll, subdirector de la policía de Washington, describió al agresor como un “tirador en solitario” que “sorprendió” a sus víctimas.
” Dio la vuelta a la esquina, alzó un arma y disparó contra los miembros de la Guardia Nacional”, relató. Otros guardias lograron neutralizarlo para su arresto, agregó.
La policía capitalina indicó que por ahora “no tenía información sobre motivos”.
” Los disparos fueron dirigidos”, señaló Muriel Bowser, la alcaldesa demócrata de Washington, en la misma comparecencia.
Este es el altercado más serio contra la Guardia Nacional desde que Trump comenzó a desplegar estas unidades de reserva en calles de varias urbes gobernadas por demócratas, bajo el argumento de necesitar reforzar la lucha contra la delincuencia y la entrada irregular de personas.
La Casa Blanca acusó a la oposición de haber “desprestigiado” a los soldados con sus críticas al despliegue.
Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
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