NUEVA YORK – Un documento dirigido a la gobernadora de Puerto Rico, Jenniffer González, señala que la descontaminación de las áreas afectadas por la Marina de Guerra de Estados Unidos en Vieques deberá culminar en 2035.
Dicha misiva, entregada por la gobernadora a El Nuevo Día, especifica que los trabajos terrestres del Programa de Respuesta a Municiones deben finalizar en 2033, y el saneamiento en zonas submarinas, para 2035.
El escrito lleva la firma de Elmer Román, exsecretario de Estado de Puerto Rico y ahora subsecretario interino para Energía, Instalaciones y Ambiente de la Marina, según informó el medio local este sábado.
“La actividad que se desarrolla allí (Vieques) es la remediación de los suelos que estuvieron expuestos a contaminantes por las prácticas militares. No hay maniobras militares, ni se prevén, ni tampoco las habrá en Culebra. Cuando observo este teatro político de la izquierda, de querer reabrir las heridas de Vieques, es un pretexto para fabricar conflictos inexistentes”, declaró González en una entrevista con el periódico.
La mandataria citó la entrega de cuatro playas en Vieques como evidencia de que la milicia estadounidense no planea reanudar las prácticas, tras más de 60 años de presencia en la isla y la ocupación de cerca de dos tercios del territorio. La Marina de EE.UU. se retiró de Vieques en 2003 tras protestas masivas y multisectoriales que incluyeron actos de desobediencia civil.
El fallecimiento del guardia civil David Sanes, quien resultó víctima de una bomba lanzada por un avión de la Fuerza Aérea de EE.UU., intensificó la movilización contra los marines en Vieques.
La reciente carta indica que, de los 19 sitios bajo el Programa de Respuesta a Municiones, en siete ya se ha concluido la limpieza y los terrenos están disponibles. Conforme al cuerpo militar, el 97% del suelo en la también conocida Isla Nena ha sido recuperado, y el 89% de las zonas marinas.
“En los próximos cinco años, más playas y áreas cercanas a la costa alcanzarán metas de saneamiento que facilitarán el uso recreativo y oportunidades económicas”, precisó Román.
El excompañero de fórmula de González añadió que el proceso de descontaminación ha requerido, hasta ahora, unos 424 millones de dólares. Los trabajos pendientes requerirán unos 260 millones adicionales.
La gobernadora reiteró su respaldo al despliegue militar en Puerto Rico y a las operaciones del gobierno de EE.UU. en aguas próximas a Venezuela, que la Administración Trump ha relacionado con esfuerzos para combatir agrupaciones vinculadas al narcotráfico.
“Como ciudadanos americanos, debemos sentir que, por primera vez, se le está dando importancia al Caribe en esta lucha (contra el narcotráfico)”, opinó la gobernadora.
A juicio de la representante republicana, las acciones del presidente y su equipo evitarán que más estupefacientes ingresen al territorio continental a través de Puerto Rico.
“Todo esto tendrá un impacto positivo. En los 90, imperaba la (política del gobierno de Pedro Rosselló de) ‘mano dura contra el crimen’. En esta ocasión, se ve al gobierno federal esforzándose por impedir la entrada de droga a Puerto Rico. Eso nunca había ocurrido. Si frenas la entrada de la droga, ¿qué vas a comercializar? Veremos el resultado. Esto lleva solo unos meses. Apoyaré cualquier medida que tome el presidente de Estados Unidos y su Consejo de Guerra en lo referente a Venezuela”, aseveró.
Según los cálculos presentados por la también presidenta del Partido Nuevo Progresista (PNP), las Fuerzas Armadas han invertido unos 20 millones en la pista de aviación de Roosevelt Roads, en Ceiba, y otros 10 millones en el aeropuerto Rafael Hernández de Aguadilla. “Será infraestructura que quedará para los puertorriqueños”, resaltó.
Las declaraciones de la gobernadora se producen en medio de un aumento en la presencia militar estadounidense en diversas instalaciones y bases en la isla.
Representantes demócratas como el comisionado residente Pablo José Hernández y las legisladoras por Nueva York y Chicago, Nydia Velázquez y Delia Ramírez, respectivamente, han enviado comunicaciones al secretario del Departamento de Defensa (DoD, renombrado como de Guerra por Trump), Pete Hegseth, solicitando información sobre la presunta autorización al personal militar para deshacerse de municiones inservibles en Vieques que no forman parte del plan de saneamiento ordenado por el gobierno federal.
Los congresistas han expresado alarma ante el riesgo de que se detengan las tareas de limpieza estipuladas por ley.
La reacción de los demócratas surgió después de que el Partido Independentista de Puerto Rico (PIP) denunciara que Vieques podría ser utilizada de nuevo por los estadounidenses para maniobras militares.
El liderazgo del PIP solicitó, tanto a la gobernadora como al comisionado, requerir a las autoridades militares la anulación de cualquier disposición que permita que la Isla Nena sea empleada para el desecho de explosivos o cualquier otra actividad militar no directamente relacionada con las labores de limpieza.
El 21 de noviembre, González afirmó que “ni Vieques ni Culebra han estado en la agenda de discusión, ni para ejercicios (bélicos), ni para nada en absoluto”.
Un informe de la GAO (Oficina de Rendición de Cuentas del Gobierno de EE.UU.) del 26 de marzo de 2021, había proyectado que los esfuerzos de saneamiento en Vieques y Culebra se prolongarían hasta, al menos, el año fiscal 2032.
“El Departamento de Defensa (DoD) sigue con sus labores de limpieza de explosivos y materiales peligrosos en las antiguas zonas militares de Vieques y Culebra, Puerto Rico, pero aún queda mucho por hacer. El DoD estima que las tareas de saneamiento seguirán hasta el año fiscal 2032. Los gastos de labores previas más los costos estimados por el DoD para la descontaminación proyectada en ambas islas y las aguas aledañas ascienden a casi 800 millones de dólares”, se lee en el resumen de los hallazgos.
La GAO detalló que los procedimientos enfrentan varios retos, como la orografía accidentada de las islas, la logística y las precauciones en el manejo de artefactos sin detonar.
“El DoD encara diversas dificultades en sus iniciativas de saneamiento, según la documentación de esta agencia y entrevistas con funcionarios de la Marina, del Cuerpo de Ingenieros (USACE) y de otras entidades federales. Algunos de estos obstáculos son la logística, la configuración del terreno y el entorno de las islas, además de los problemas de seguridad asociados con la manipulación de municiones sin explosionar”, explicó la entidad.
También señalaron como un obstáculo la desconfianza comunitaria respecto a la forma en que las Fuerzas Armadas ejecutan los trabajos de saneamiento. “El DoD está adoptando medidas para abordar estos asuntos, y está implementando procedimientos, protocolos y sistemas para que la comunidad pueda expresar sus opiniones. Por ejemplo, como respuesta a la problemática medioambiental, las agencias establecieron un procedimiento operativo estándar para proteger a las especies vulnerables y amenazadas y a sus entornos”, destacó el informe.
La oficina también mencionó que la Marina y el Cuerpo de Ingenieros utilizan diversas técnicas en las obras de saneamiento. “Por ejemplo, estas entidades implementan tecnologías como la clasificación geofísica avanzada, para ubicar explosivos en tierra, y un conjunto de magnetómetros remolcados, para localizar artefactos bajo el agua. Las agencias valoran la factibilidad de las innovadoras técnicas de saneamiento mediante la participación activa en los programas de investigación ambiental del DOD y en los procesos específicos de transferencia de tecnología de las fuerzas armadas”, concluyeron.
La gentrificación se suma a las peticiones de líderes en Vieques por la lentitud en la descontaminación de terrenos por la Marina de EE.UU.
Boricuas temen un nuevo episodio de contaminación por la Marina de EE.UU., similar al de Vieques.
Saneamiento de terrenos contaminados en Vieques, Puerto Rico, bajo la lupa de la Casa Blanca y el Congreso.
Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
Agregar Comentario