WASHINGTON.- Representantes demócratas en el Congreso de EE. UU. mostraron el miércoles imágenes y grabaciones de las residencias del condenado por delitos sexuales Jeffrey Epstein, donde supuestamente forzaba a menores a la prostitución.
Las tomas del antiguo refugio caribeño de Epstein apenas aportan novedades al complicado asunto.
No obstante, podrían incrementar la exigencia al gobierno de Trump para que revele toda la documentación reunida a lo largo de los años de pesquisas sobre las acciones de Epstein.
Los 14 clips y fotografías exponen los inmuebles de Epstein en la isla de Little Saint James, en las Islas Vírgenes Estadounidenses.
En una de las estancias, un panel exhibe términos escritos como “engaño”, “dominio”, “realidad” y “gestión pública”.
Donald Trump batalló durante meses para impedir que se hicieran públicos los legajos de Epstein bajo resguardo del Departamento de Justicia.
El 19 de noviembre, cedió ante la presión del Congreso, incluyendo miembros de su propio partido, y promulgó una ley que fuerza la entrega de una parte del material.
Queda por saber qué expedientes se harán públicos, dado que es previsible que las autoridades invoquen la necesidad de salvaguardar investigaciones en curso.
Epstein, un exitoso financiero, era conocido por ser allegado a figuras adineradas e influyentes, a quienes recibía a menudo en su residencia caribeña.
En 2008 fue sentenciado por dos cargos ligados a abusos sexuales, incluyendo incitar a la prostitución a una menor de edad.
Solo cumplió cerca de un año tras las rejas con libertades poco habituales. Posteriormente, esquivó acusaciones más graves hasta 2019, fecha en que fue aprehendido y señalado por tráfico sexual de menores.
Falleció bajo custodia provisional en Nueva York ese mismo año, y su deceso fue calificado como suicidio.
Durante años, Trump y sus partidarios difundieron especulaciones de que importantes figuras demócratas estaban siendo protegidas por sus vínculos con Epstein, presentando el caso como un claro indicio de cómo individuos ricos pueden resguardarse tras letrados, dinero y contactos influyentes.
Sin embargo, el propio Trump fue amigo de Epstein por un tiempo, lo que ha suscitado interrogantes sobre lo que sabía del abusador sexual, algo que en algún momento catalogó como un “montaje” y se resistió a divulgar documentos de la indagatoria.
Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
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