Concebimos sesiones amenas donde se trate el ciclo femenino con transparencia, al nivel de describir un plato típico dominicano, usando material gráfico y audiovisual para ilustrar que es una función corporal, no una penalización. Charlas en las regiones con chicos y chicas desharían la incomodidad, ya que el conocimiento general elimina la burla.
En suelo dominicano, todas hemos experimentado el pudor al verbalizar “menstruación” en voz alta, como si fuera un secreto que se oculta tras eufemismos como la regla, el período, “eso”, la visita o la luna, levantando la mirada como si proviniera de algún astro.
Es una barrera cultural que nos hacía percibirnos extrañas por un proceso biológico mensual, pero existen métodos directos para transformar esto en los centros educativos, comenzando por nuestra propia actitud para que las jóvenes se sientan plenas y seguras.
Concebimos sesiones amenas donde se trate el ciclo femenino con transparencia, al nivel de describir un plato típico dominicano, usando material gráfico y audiovisual para ilustrar que es una función corporal, no una penalización. Charlas en las regiones con chicos y chicas desharían la incomodidad, ya que el conocimiento general elimina la burla.
Recordamos la solicitud: “pásame una Camelia, un Kotex o una Eva” refiriéndose a la compresa sanitaria. La Camelia era la más usual, Kotex era para féminas con mayor solvencia económica, y Eva la opción accesible que promocionaba Marcia Matos en Radio Guarachita con su frase: “Papel no, algodón sí”. Antiguamente, las de menos recursos empleaban paños de tela que cocían con sumo cuidado para que los hombres no detectaran la llegada de la menstruación.
En territorio español utilizan “Andrés” o “Juana la colorada” para disimular, en Colombia escuché “me cantó el gallo”, y en Puerto Rico es similar.
La principal inquietud de los progenitores era la menarquia, el momento en que la hija alcanzaba la madurez y requería mayor vigilancia, pues no estaba lista ni física ni emocionalmente para la concepción. Es un periodo donde las hormonas fluctúan intensamente, los ciclos son erráticos y el organismo está aún en desarrollo.
Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
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