Archivo – Detalle de la fachada principal de la Audiencia Provincial de Sevilla. (Foto de archivo). – JOAQUIN CORCHERO / EUROPA PRESS – Archivo
Europa Press Andalucía
Publicado: miércoles, 17 diciembre 2025 5:51
Abrir opciones para compartir
IA
Seguir en
SEVILLA 17 Dic. (EUROPA PRESS) –
La Fiscalía de Sevilla solicita un total de treinta años de prisión para un hombre acusado de ejercer “malos tratos habituales” sobre su esposa, con quien mantenía una relación matrimonial desde hacía nueve años. Entre las conductas denunciadas se incluyen actos de índole sexual sin su consentimiento, grabados “bajo amenazas” de difusión, así como la oferta de relaciones sexuales con la mujer a sus amigos o usuarios de Internet para “saldar sus deudas pendientes u obtener sustancias estupefacientes”. Por estos hechos, el Ministerio Público considera al acusado autor de un delito de maltrato habitual en el ámbito familiar, agravado por haberse cometido en el domicilio familiar y en presencia de menores; dos delitos de violación; un delito de inducción a la prostitución; y un delito de maltrato sin lesión en el ámbito familiar, también agravado por haberse cometido en el domicilio familiar. Por estos delitos, solicita penas que varían entre uno y doce años de prisión.
Según el escrito de conclusiones provisionales del Ministerio Público, consultado por Europa Press, durante los años de matrimonio, la víctima “había venido sufriendo malos tratos habituales por parte de su esposo, consistentes en golpes, empujones” y otras “conductas vejatorias, como grabarla manteniendo relaciones sexuales con un segundo procesado en la causa y amenazarla con hacerlas públicas, expulsarla junto con su hija del domicilio o controlar su móvil e impedirle salir del domicilio si no era en compañía del procesado principal”.
Estas conductas, señala el escrito, constituyen actos que “han supuesto usar a su esposa a modo de objeto, disponiendo de ella y de su sexualidad sin su consentimiento, sometiéndola a actos denigrantes como compartir sexo con terceros a instancias del procesado, sin que conste que haya sufrido lesiones al no haber acudido a centro médico alguno”.
El Ministerio Público añade que estas conductas “agresivas y desconsideradas han formado parte de la dinámica relacional de la pareja, con el acusado ejerciendo un dominio y sometimiento absolutos, tanto psicológico como físico, sobre la perjudicada, evidenciándose signos de malos tratos habituales y puntuales, así como una relación de asimetría en la pareja”.
De este modo, según la Fiscalía, “como consecuencia de la anulación de la voluntad que suponía para la víctima dicha situación, ella no oponía resistencia a las relaciones sexuales que le exigía el procesado, debiendo soportarlas contra su voluntad para evitar conflictos o agresiones hacia ella o hacia la hija común”. En concreto, se señala un episodio en 2012 en el que el acusado mantuvo relaciones sexuales con la víctima mientras ella dormía, bajo los efectos del alcohol ingerido la noche anterior, causándole lesiones.
Durante la convivencia con el investigado, continúa el escrito, “abusando de su superioridad y de la situación de necesidad de la víctima, que dependía económicamente de él, el acusado buscaba por Internet y ofrecía a sus amigos y conocidos mantener relaciones sexuales con la mujer como forma de saldar sus deudas pendientes o para obtener sustancias estupefacientes que consumía”.
Asimismo, según la Fiscalía, “en una fecha no determinada del año 2017 y en el domicilio familiar, el acusado golpeó reiteradamente en la espalda a la hija menor de ambos, nacida en 2013, sin que conste que la menor sufriera lesiones, ya que no fue examinada por ningún facultativo”.
Además, en una fecha no concretada de 2016, el principal acusado y el segundo investigado ataron a la víctima en el dormitorio para mantener con ella relaciones sexuales “contra su voluntad”, según la Fiscalía.
Los hechos descritos son, a juicio del Ministerio Público, constitutivos de un delito de maltrato habitual en el domicilio familiar, agravado por haberse cometido en presencia de menores; dos delitos de violación; un delito de inducción a la prostitución; y un delito de maltrato sin lesión en el ámbito familiar.
Así, la Fiscalía considera al marido de la víctima autor de los delitos mencionados, mientras que al segundo procesado lo considera coautor de uno de los delitos de violación.
Por estos hechos, la Fiscalía ha solicitado penas que oscilan entre uno y doce años de prisión, sumando en total una petición de treinta años de cárcel para el acusado principal. Para el segundo procesado, considerado coautor del segundo delito de violación, solicita doce años de prisión.
Además, ambos procesados deberán indemnizar a la víctima con 20.000 euros por daño moral, más los intereses legales correspondientes, en concepto de responsabilidad civil. Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.










Agregar Comentario