Washington.- El Ejército de Estados Unidos anunció este viernes el inicio de un “ataque a gran escala” contra objetivos del Estado Islámico (EI) en Siria, como represalia por la emboscada perpetrada la semana pasada que causó la muerte de dos soldados y un intérprete, todos estadounidenses, en la provincia siria de Homs.
“Las fuerzas estadounidenses han lanzado un ataque a gran escala contra la infraestructura y los depósitos de armas del EI en Siria. Esta ofensiva masiva se realiza tras el ataque contra las fuerzas estadounidenses y sus aliados en Siria el 13 de diciembre”, informó en un breve comunicado el Comando Central de Estados Unidos.
Poco después de difundirse este comunicado, el secretario de Defensa, Pete Hegseth, anunció la operación en redes sociales y explicó que la campaña ha sido denominada Operación Ataque Ojo de Halcón.
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“Esto no es el inicio de una guerra, es una declaración de venganza”, afirmó Hegseth.
“Como dijimos inmediatamente después del brutal ataque (del 13 de diciembre), si atacan a estadounidenses, en cualquier parte del mundo, pasarán el resto de su corta y angustiosa vida sabiendo que Estados Unidos los perseguirá, los encontrará y los eliminará sin piedad”, señala el texto.
Según un funcionario estadounidense anónimo citado por el diario The New York Times, decenas de presuntos emplazamientos del EI en diversos puntos del centro de Siria fueron atacados con cazas de combate, helicópteros de ataque y salvas de artillería, y se espera que los bombardeos duren varias horas.
¿Quiénes eran los soldados que murieron?
Los dos militares y el traductor atacados el pasado sábado por un solo tirador cerca de la ciudad siria de Palmira son los primeros estadounidenses que han muerto en el país desde la caída del régimen de Bashar al Assad el año pasado. Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
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