Logroño, 30 Ago. (EUROPA PRESS) -.
Investigadores adscritos a la Jefatura Superior de Policía de La Rioja han alertado sobre un nuevo tipo de estafa conocida como ‘phishing de autocaravanas’, que se produce principalmente durante los meses de verano.
‘Phishing’ es un tipo de ciberdelincuencia que intenta engañar a los usuarios de Internet para obtener de forma fraudulenta dinero, cuentas bancarias, contraseñas, etc.
El “phishing de coches” es una variante del phishing, que utiliza la venta de coches como gancho para engañar a los compradores. Hay una organización bien coordinada detrás de las estafas de phishing de coches. Son difíciles de detectar porque colocan sus anuncios en sitios web legítimos y publican datos reales, por lo que no hay motivo a priori para sospechar que los anuncios son falsos.
El modus operandi de las estafas de autocaravanas consiste en que los estafadores o las bandas de delincuentes publican anuncios de venta de autocaravanas en portales de Internet especializados en la compraventa de coches, normalmente vendiendo vehículos de lujo a precios significativamente inferiores a los del mercado para atraer a los compradores.
Las víctimas se ponen en contacto con el supuesto vendedor del vehículo a través de un número de teléfono que aparece en el anuncio para iniciar el proceso de compraventa.
La persona que contesta al teléfono les dice que el vehículo se encuentra en el extranjero y que, para garantizar la transacción, utilizará a un intermediario (una empresa de transporte que traslada el vehículo hasta el lugar de destino, donde el comprador revisa el vehículo “in situ” en el lugar de destino y lo paga si no hay problemas), que supuestamente no tiene relación con el vendedor, para realizar el pago posteriormente.
En otras palabras, el único pago que se exige por adelantado al comprador es este servicio de transporte/intermediación, que puede pagarse de diversas formas, entre ellas, como en este caso, mediante transferencia bancaria o a través de una empresa de envío de dinero.
Una vez transferido el dinero, el estafador ya no responde ante el comprador y la supuesta empresa de transporte o no existe o, si existe, asume fraudulentamente su identidad para engañar al comprador y darle una grave y/o falsa impresión de seguridad.
Existen diversas variantes de este “modus operandi”, en las que el supuesto transportista, que está a punto de entregar el vehículo, se niega a comprarlo a su llegada y exige el pago de la misma cantidad o de un porcentaje del total, asegurando que si no están de acuerdo con su estado, pueden reclamar lo pagado.
En realidad, nada de esto existe, y los autores del fraude y las organizaciones delictivas han intervenido para ofrecer falsas garantías y tranquilizar a los compradores.
Una vez transferido el dinero, la víctima no vuelve a ser contactada por el supuesto vendedor.
Recomendaciones Por lo tanto, se aconseja a los particulares que realicen una serie de comprobaciones sencillas antes de pagar este tipo de compras:
Entre ellas: precio bajo, necesidad de vender por desempleo, fotos atractivas en los anuncios, posibles valoraciones (falsas) de los usuarios, etc. En Internet no hay gangas.
Intentan convencerte de que sus ventas son legítimas. Para ello, simulan contratos de venta sin valor, mantienen conversaciones agradables para ganar credibilidad, envían capturas de pantalla falsas de lo que creen que es una venta o envían documentos de identidad que coinciden con los enviados por otras víctimas. Al fin y al cabo, una venta entre particulares se basa en una relación de confianza entre las dos partes, y las formalidades por parte del vendedor no tienen ningún valor porque pueden ser falsas.
Bajo ningún pretexto se deben enviar documentos personales a particulares. Pueden utilizarla para hacerse pasar por usted y enviarla a otras víctimas, que pueden denunciarle o registrarle fraudulentamente en otros servicios.
Utilizan servicios como Whatsapp para engañar a las víctimas y ganarse su confianza. Es aconsejable gestionar las compras por teléfono y preguntar características concretas sobre el producto para verificar su versión de los hechos.
No pague el precio por adelantado. Es aconsejable comprar artículos que se puedan verificar en persona y realizar el pago en persona o utilizar un método de pago que permita retener el pago hasta la recepción del artículo en venta.
Las plataformas de artículos de segunda mano no se responsabilizan de estas estafas, no verifican su legitimidad y no retiran los anuncios fraudulentos, por lo que es posible que los estafadores sigan operando o que los anuncios sigan siendo válidos.
Si ocurre algo sospechoso, aunque sea por un momento, corta todas las conversaciones.
Si se realiza una transacción y poco después se da cuenta de que es una estafa, póngase en contacto inmediatamente con su banco para anular la operación y denúnciela lo antes posible.