¿Alguna vez te has parado a pensar en el verdadero significado de estas palabras para la humanidad? ¿Has apreciado esas dimensiones en nuestro mundo?
¿Estás tratando de implementarlos en tu propia vida y en relación con el medio ambiente?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha decidido declarar el 10/10 como “Día Mundial de la Salud Mental.”¿Cómo define esto la salud mental? “Un individuo es capaz de reconocer sus habilidades, hacer frente a las tensiones normales de la vida, hacer un trabajo productivo y fructífero, y contribuir a su comunidad.”
En otras palabras, la salud mental incluye nuestro bienestar emocional, psicológico y social. Ese cambio, como sucede todos los días, afecta la forma en que pensamos, sentimos y actuamos cuando enfrentamos la adversidad de la vida.
Puedes leer: Gente genial
Queridos lectores, dejen de pensar en todos los efectos del comportamiento humano en la vida cotidiana. Cómo una persona mentalmente cambiada puede cambiar la vida de su familia, país e incluso el mundo. Muertes producidas a lo largo de la historia por mentes desequilibradas: psicópatas, pervertidos, sádicos, irreflexivos, psicópatas, innumerables. Aparte de las huellas dejadas en lo que sigue existiendo.
La pandemia nos ha afectado mucho. Por supuesto, fue una situación que afectó a todos los países.
Sin embargo, permanecer en un ambiente dominicano puede confirmar que la ansiedad (43,7%), la depresión (35,5%), los trastornos del sueño, los conflictos matrimoniales, los trastornos alimentarios, las dificultades económicas con graves consecuencias emocionales y miles de personas quedan desempleadas y atrapadas, exacerbando los conflictos y las dificultades, que, junto con ciertas afecciones médicas, permitieron la aparición de síntomas agresivos y violentos.
Se cree que alrededor del 20% de la población dominicana padece trastornos mentales. Nadie dudará de que esta cifra es alta. Aparte del subregistro, hay partes de la población que no otorgan importancia a los trastornos mentales hasta que ocurren eventos relevantes. Parte de la población todavía prepara sus tizanas para ellos y les da pastillas tomadas por familiares y vecinos. No te olvides de aquellos que tienen brujas favoritas y confían ciegamente en ellas.
La mente es un conjunto de habilidades cognitivas que abarcan procesos como la percepción, el pensamiento, la conciencia, la memoria y la imaginación. Nuestra mente es la administradora funcional de todos nuestros mecanismos internos, de la actividad de nuestros órganos e incluso de los más automáticos e instintivos.
El cerebro controla la respiración, la frecuencia cardíaca, la digestión, la temperatura, los cinco sentidos y el movimiento de nuestros cuerpos. Al mismo tiempo, se hace posible el pensamiento, la comunicación, el control de las emociones y la formación de opiniones. Es el centro de coordinación de la actividad sensorial e intelectual: memoria y resolución de conflictos.
La mente humana es tan poderosa que afecta directamente a cada uno de nosotros, nuestras acciones, pensamientos conscientes e inconscientes. Muchas veces no paramos de revisar, esa parte de lo que nos pasa, bueno o malo, empieza en nuestra mente. Si esto es tan obvio, ¿por qué no una mayor asignación presupuestaria asignada a toda la gestión relacionada con la salud mental?
Aprovechamos esta oportunidad para felicitar al recién elegido Director de la Asociación Dominicana de Psiquiatría y, al mismo tiempo, proponer que se una al Departamento de Salud Mental del Ministerio de Esfuerzo, Competencia y Salud Pública, junto con universidades y otras instituciones, para organizar eventos y actividades que hagan una contribución notable a la promoción de la salud mental en nuestro país. Nos damos cuenta de que no es una tarea fácil, pero es nuestro deber.
Nuestros conciudadanos deben recibir una buena orientación, opiniones autorizadas sobre la conveniencia de ayudarse mutuamente y ayudarse mutuamente en este sentido. Muchos colegas y amigos de otras regiones pueden contribuir con su conocimiento y creatividad en la promoción y promoción de campañas de salud mental en todo el país. Además de evitar conflictos innecesarios, agresiones, actos de violencia y abuso de sustancias, insistimos en la necesidad de mejoras significativas en la atención de nuestros pacientes.
Al mismo tiempo, instar al gobierno central a mejorar significativamente a nivel presupuestario las partidas dedicadas a este sector olvidado.
Ya se ha dicho. Queremos enfatizar que: “No hay salud sin salud mental.”‘