Washington, 27 dic (Prensa Latina) Una delegación de alto nivel de EE.UU., en momentos en que una nueva oleada de miles de migrantes promete cruzar la desbordada frontera sur, se dirigió a México para reunirse con el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El Secretario de Estado, Antony Blinken, encabezará la delegación estadounidense, que estará acompañada por el Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, y la Asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Liz Sherwood-Randall.
Según la Casa Blanca, en la reunión se discutirá la migración irregular sin precedentes en el hemisferio occidental y se identificarán formas de abordar los desafíos de seguridad fronteriza, incluyendo acciones para reabrir los puertos de entrada donde México y Estados Unidos comparten frontera.
Una caravana de más de 8.000 solicitantes de asilo de unos 24 países iniciará su marcha desde Tapachula, en el sur de México, en Nochebuena, y se espera que más de 15.000 lleguen a la frontera.
La semana pasada, el presidente Joe Biden se reunió con el presidente López Obrador para tratar la crisis de los migrantes.
En esa reunión, los dos líderes acordaron que se necesitaban urgentemente más medidas de aplicación de la ley.
Mientras tanto, el ex presidente Donald Trump ha intensificado su retórica antiinmigración, calificando a los extranjeros que intentan establecerse en este país de veneno que corre por la sangre del país.
Trump, el principal aspirante en las encuestas para la nominación republicana de 2024, dijo que llevaría a cabo deportaciones masivas si regresa al Despacho Oval en enero de 2025.
Según datos de las autoridades federales, más de 2 millones de migrantes cruzaron la frontera sur de EE.UU. en los años fiscales 2022 y 2023, y la afluencia no da señales de detenerse ni siquiera ahora.
Sólo en noviembre, casi 250.000 inmigrantes ilegales cruzaron la frontera.
La seguridad fronteriza sigue siendo el punto débil de Biden en 2024, pero está en el punto de mira este mes, ya que se está negociando un acuerdo sobre inmigración que incluye una petición de ayuda militar adicional a Ucrania.
El Senado, que había aplazado su receso navideño, no logró alcanzar un acuerdo y los legisladores decidieron abandonar Washington.