Benjamín Netanyahu aseguró ayer que Israel está decidido a llevar a cabo una ofensiva terrestre en Rafah, en el extremo sur de Gaza, ante la creciente presión internacional, advirtiendo contra tal actividad en un situación en la que estaban reunidos 1,4 millones de palestinos, la mayoría de ellos desplazados internos. Quienes dicen que bajo ninguna circunstancia debemos entrar en Rafah están diciendo esencialmente que estamos perdiendo la guerra contra Hamás, dijo Netanyahu en una entrevista con ABC News, en un momento en que el ejército israelí luchaba en la región de Khan Younis y su ubicación. Se teme que estén avanzando por tierra hacia Rafah, frontera con Egipto y donde se ha refugiado, con diferencia, la mayor parte de la población de toda Gaza.
Las alarmas sobre la operación se hacen sentir en el seno de Naciones Unidas, que ha advertido de una posible masacre de civiles y violación del derecho internacional si se lleva a cabo. Puedes leer: Papa y Milei se besan tras canonización del primer santo de Argentina Estados Unidos también expresó su preocupación, y ayer Joe Biden habló sobre este tema con el primer ministro Netanyahu en una llamada de 45 minutos en la que le aseguró a Netanyahu que la operación en Rafah no debería llevarse a cabo de otro modo tendría un plan creíble y viable. Hace dos días, el Primer Ministro israelí ordenó al ejército que elaborara un posible plan de evacuación de civiles de Rafah, atrapados en el extremo sur de Gaza sin salida.
A cambio, Egipto exigió ayer que todos los esfuerzos internacionales y regionales se unan para evitar un ataque. Esto afectará enormemente al país porque tiene una frontera de 14 kilómetros de largo con Gaza, adyacente a Rafah, conocida como la “Línea Filadelfia”. Un fuerte ataque israelí contra Rafah -el único punto de Gaza sobre el que aún no ha tomado el control- podría causar más tensión e inestabilidad en la península egipcia del Sinaí.
El Cairo teme un éxodo masivo de civiles palestinos a su territorio, que hasta ahora no se ha producido porque sólo les permite el paso en pequeños tramos. Egipto ha pedido a las potencias internacionales influyentes que aumenten la presión sobre Israel en respuesta a los esfuerzos de alto el fuego. El país también ha militarizado su frontera con Gaza y está construyendo una valla cerca del puesto fronterizo.