Washington y Nueva York. El asesinato de siete trabajadores humanitarios de la organización estadounidense World Central Kitchen (WCK) llevó al presidente Joe Biden a expresar sus condolencias, pero su portavoz, John Kirby, se atrevió a declararlo en este ataque, así como en los cinco o seis incidentes recientes. El gobierno no ha encontrado ninguna acción israelí que viole el derecho internacional.
En una semana en la que la administración de Joe Biden admitió que envió a Israel casi una tonelada más de bombas grandes capaces de destruir barrios enteros y consideró enviar más aviones de combate F-15, el ataque de Israel ha matado a trabajadores humanitarios que viajaban en vehículos claramente marcados y su movimiento ha sido afectado. fue denunciado al ejército israelí, lo que provocó ira y condena. El fundador de WCK, el chef español José Andrés, es muy conocido en la prestigiosa zona de Washington, donde se encuentran algunos de sus restaurantes más famosos.
A medida que aumentaba el número de víctimas en la guerra en Gaza, los medios de comunicación informaron ampliamente sobre sus esfuerzos por llevar ayuda a esa zona, junto con las condiciones que presenció. El presidente Biden emitió un comunicado expresando su indignación por la muerte de los trabajadores humanitarios, que calificó de tragedia, exigiendo una investigación exhaustiva por parte de Israel y enfatizando que él no lo hizo. Este no es un incidente excepcional, ya que muchos trabajadores humanitarios han muerto en Gaza.
y acusó a Israel de no hacer lo suficiente para proteger a los civiles en este conflicto. Pero evitó declarar que el ataque fue un crimen o que cambiaría la política hacia la guerra de Israel. Añadió que ayer habló con su amigo José Andrés para expresarle sus condolencias y apoyo a los heroicos esfuerzos de su organización en Gaza.
No respondió a la petición de la WCK de que Israel detuviera los asesinatos indiscriminados en la zona. Pero ayer en la Casa Blanca le preguntaron a Kirby si disparar misiles y matar a trabajadores humanitarios violaba el derecho internacional. Kirby responde: Tu pregunta sugiere que fue un ataque deliberado…
no hay evidencia de ello. Esto a pesar de que, como han señalado varios expertos en derechos humanos, los vehículos tenían grandes logotipos de WCK pintados en el techo y estaban a dos kilómetros de distancia cuando los misiles fueron disparados y alcanzados varias veces.
