CIUDAD DEL VATICANO. Este sábado, el Papa ha agradecido a los treinta premios Nobel de la Paz reunidos estos días en Roma y el Vaticano su labor que incluye la difusión silenciosa de la guerra, que calificó de engaño, así como contra la idea de una seguridad internacional basada en la disuasión. .
miedo. En un planeta en llamas os habéis reunido con la intención de reafirmar vuestro “no” a la guerra y vuestro “sí” a la paz, dando testimonio de la humanidad que nos une, dijo el Papa Francisco al inicio de la audiencia que concedió. los participantes.
Conferencia Mundial sobre la Fraternidad. El encuentro, que contó con la participación de personalidades del mundo de la ciencia, la política, el arte y el deporte, con el objetivo de reflexionar sobre la fraternidad humana y cómo construir un mundo en paz en el futuro, finalizará hoy, tras dos días de debates y mesas redondas sobre temas como la paz, los sistemas alimentarios o la sostenibilidad. Esta tarde se reunirán en 12 puntos del Vaticano y Roma para expresar su intención de crear un movimiento fraterno y se presentarán a la sociedad civil una serie de propuestas, centradas en la dignidad de la persona humana, para construir buenas políticas, dijo.
. . Únase a ABC en WhatsApp Leer más: El Papa Francisco pide oraciones por él pero por él, no contra él durante un evento en Roma Y los animó a continuar con la labor silenciosa de sembrar semillas, de las que, dijo, podría nacer un “Código del Hombre”, que incluya, además de los derechos, también actos y razones la realidad de lo que nos hace más humanos.
. en la vida”, añadió. En particular, quisiera agradecer al distinguido grupo de premios Nobel presentes, por la Declaración sobre la Fraternidad Humana preparada el 10 de junio del año pasado, así como por el compromiso asumido este año hacia la reconstrucción de una gramática humana, en la que agregado.
También les pidió promover, a través de la acción diplomática, el papel de los organismos multilaterales porque la guerra es un engaño, como lo es la idea de seguridad internacional basada en la disuasión del miedo. Para garantizar una paz duradera, es necesario reconocer una vez más la humanidad común y colocar la fraternidad en el centro de la vida de los pueblos. Sólo así podremos desarrollar un modelo de convivencia capaz de dar un futuro a la familia humana: la paz política requiere paz del corazón, concluyó.
Por la tarde, el Papa se reunió con los niños que le esperaban en la sala del Sínodo, donde tuvo lugar un banquete sobre la infancia y donde Francisco y los niños hablaron sobre la paz, que se construye cada día sin insultos ni discusiones con los demás. Hay niños que viven en la guerra, con miedo a las bombas, sin comida. La reunión también mira hacia la primera Jornada Mundial del Niño, que tendrá lugar el sábado 25 y domingo 26 de mayo en el Estadio Olímpico de Roma y en la Plaza de San Pedro, a la que acudirán decenas de miles de niños.
Más de 90 países. En el Encuentro Mundial de la Fraternidad participan personas de diversos ámbitos y, junto a los premios Nobel de la Paz, entre ellos la guatemalteca Rigoberta Menchú y el costarricense Carlos Umaña, está el director de la NASA, Bill Nelson, y el alcalde de Nueva York, Eric. Leroy Adams o la viuda de Nelson Mandela, Graça Machel.