La organización reportó una alta cobertura en educación primaria pero baja en educación preescolar
y educación secundaria, y agregó que, aunque el país ha mejorado, aún ocupa el último lugar en el examen PISA 2022.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ha publicado «Un panorama de oportunidades en República Dominicana”, documento que reconoce los logros económicos del país, pero destaca las brechas y retos que aún persisten en términos de productividad, servicios básicos como educación y salud, límites de gasto y las amenazas del cambio climático.
En el frente educativo, el BID enfatizó que si bien el gasto público en este sector aumentó, todavía corresponde en gran medida al gasto corriente y enfatizó que entre 2012 y 2023, el número de personal administrativo en el sector educativo se ha duplicado, lo que refleja un mayor crecimiento en el número de profesores. docentes.
La organización reportó alta cobertura en educación primaria pero baja en educación inicial
y educación secundaria, y dijo agregando que si bien el país ha mejorado, todavía se encuentra en al final del examen PISA 2022.
Señaló que la inversión en el sector educativo se ha duplicado, pero enfatizó que podría ser
más importante y más efectiva. Dijo que el gasto público en educación como porcentaje del PIB aumentó del 2,1% en 2011 al 3,8% en 2023, mientras que los salarios aumentaron del 1,2% al 6%.
También muestra que el aumento del gasto en educación ha no se traduce en mejoras significativas en la calidad de la educación.
Como buena medida, la agencia recomienda aumentar el acceso a una educación de calidad, a través de tutorías remotas o inteligencia artificial, y mejorar el gasto en esta área.
Para este último aspecto, el BID recomienda fortalecer la toma de decisiones con base en el
Sistema de Información para la Gestión Escolar (SIGERD), incluyendo una dotación óptima de personal, un
Docente sistema de asignación, identificadores únicos para todas las escuelas, recursos
y estudiantes, así como un panel de seguimiento de recursos.
Además, sugiere el desarrollo de una política salarial docente basada sobre mérito y desempeño, y la implementación de evaluaciones nacionales de desempeño según habilidades y calificaciones docentes.
De manera similar, el BID mencionó la necesidad de diseñar una fórmula para mejorar la eficiencia y equidad en las transferencias a las juntas escolares, con procesos de seguimiento de recursos más eficaces y fortalecer la capacidad técnica de los consejos para gestionarlos.