Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
SAN FRANCISCO. Meta, el coloso tecnológico de las redes sociales, se enfrenta desde hoy a un juicio crucial, que podría obligarlo a deshacerse de Instagram y WhatsApp.
La empresa de Mark Zuckerberg comparecerá ante un tribunal de Washington hoy, al inicio de un proceso que su propietario intentó por todos los medios evitar.
Si el gigante de las redes sociales pierde, podría verse obligado a separarse de Instagram y WhatsApp.
La autoridad estadounidense de defensa de la competencia, la FTC, presentó una demanda en 2020 acusando a Meta (entonces Facebook) de haber comprado la red social Instagram y el servicio de mensajería WhatsApp para “eliminar las amenazas a su monopolio”.
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Recientemente Zuckerberg, dueño de la tercera mayor fortuna del mundo, hizo varias visitas a la Casa Blanca para lograr que el presidente Donald Trump le ayudara a evitar que el proceso derivara en un juicio y, en su lugar, se llegara a un acuerdo con la FTC.
“Me sorprendería mucho si algo así ocurriera”, declaró el jefe de la FTC, Andrew Ferguson, a The Verge.
Como parte de sus esfuerzos para frenar el juicio, Zuckerberg hizo contribuciones financieras al fondo para la investidura de Trump -que asumió el 20 de enero-, designó a aliados republicanos en puestos importantes en Meta y flexibilizó las normas de moderación de contenidos.
La demanda contra Meta representa una de las cinco mayores acciones legales contra los gigantes tecnológicos en Estados Unidos.
A lo largo de ocho semanas de proceso, la FTC debe probar que Meta abusó de su posición dominante para comprar Instagram en 2012 por 1.000 millones de dólares y WhatsApp por 19.000 millones en 2014.
Para la FTC, “durante más de una década, Meta mantuvo en Estados Unidos un monopolio en los servicios de redes sociales”, que permiten a las personas estar en contacto con sus familias y amistades.
Según el organismo regulador, otras plataformas importantes como YouTube y TikTok no están en la misma categoría.
Pero Meta, con sede en Menlo Park, California, niega esto.
“El hecho de que esos servicios difieran en ciertos aspectos de las aplicaciones de Meta solo demuestra que sus competidores cercanos innovan con herramientas y funciones para captar la atención de los usuarios”, argumenta la defensa.
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