Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
Nueva York. — La crisis humanitaria en Haití se ha profundizado de manera preocupante durante los primeros meses de 2025, dejando a millones de personas expuestas a hambre extrema, desplazamientos forzados y un incremento notable de la violencia sexual, en particular contra mujeres y niñas.
Según el informe más reciente de la Clasificación Integrada de Seguridad Alimentaria (IPC), publicado el 14 de abril, cerca de 5.7 millones de personas — más de la mitad de la población haitiana — se enfrentan a niveles críticos de inseguridad alimentaria.
La escasez de alimentos se ha visto agravada por la violencia, la destrucción de vías de suministro y la paralización del comercio local.
En una rueda de prensa celebrada el 16 de abril, la directora general de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Amy Pope, informó que casi un millón de personas se encuentran desplazadas dentro del país, muchas de ellas viviendo en condiciones inhumanas, sin acceso a servicios básicos ni garantías de seguridad.
Un informe del Secretario General de la ONU, que será presentado este lunes 21 de abril al Consejo de Seguridad, advierte además que la crisis ha favorecido la reaparición de brotes de cólera, especialmente en el departamento de Artibonite, donde la falta de agua potable y saneamiento facilita la propagación de enfermedades.
De acuerdo con los mecanismos de monitoreo de la Oficina Integrada de la ONU en Haití (BINUH), entre octubre de 2024 y febrero de 2025 se registraron 347 incidentes de violencia sexual, que afectaron a 379 personas: 315 mujeres, 63 niñas y un hombre.
Las condiciones precarias en los campamentos de desplazados aumentan los riesgos, ante la falta de iluminación, la lejanía de los puntos de agua y la carencia de infraestructura segura y adaptada para mujeres.
Organizaciones como CARE International han denunciado que el hambre, la violencia y la falta de protección impactan de forma desproporcionada a mujeres y niñas, quienes también enfrentan la responsabilidad de sostener a sus familias en medio del caos.
El Plan de Respuesta Humanitaria para Haití 2025, presentado por la ONU y sus socios el pasado 25 de febrero, estima que se necesitarán 908 millones de dólares este año para brindar ayuda vital y protección a 3.9 millones de personas vulnerables. Sin embargo, al 17 de abril, solo se había recaudado el 6.3 % del monto requerido.
Durante la próxima reunión del Consejo de Seguridad, se espera que varios Estados miembros insten a la comunidad internacional a responder con mayor urgencia ante esta emergencia, condenen todas las formas de violencia sexual y exijan medidas de protección integrales para los grupos más vulnerables.
En medio del deterioro de la seguridad, el colapso institucional y el aumento de la miseria, Haití enfrenta uno de los momentos más críticos de su historia reciente.
La comunidad internacional tiene ante sí el reto de actuar con recursos, coordinación y compromiso sostenido para evitar una catástrofe humanitaria aún mayor.
Agregar Comentario