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La exigencia de profesionales con habilidades sostenibles y tecnológicas se acentuó en los últimos años, con un incremento del 17% en la demanda de competencias verdes entre 2018 y 2023. Así lo revela el Barómetro Universitat Oberta de Catalunya (UOC)-PIMEC, en un informe que examina más de siete millones de ofertas laborales y confirma una tendencia definitiva en el mercado laboral hacia la sostenibilidad y la transformación digital. Los perfiles más requeridos combinan conocimientos en eficiencia energética, legislación ambiental, responsabilidad social corporativa (RSC) y el empleo de tecnologías emergentes como la inteligencia artificial para la gestión eficaz de recursos.
Pese al crecimiento en la demanda, el estudio también evidencia una carencia significativa de profesionales jóvenes preparados para desempeñar puestos relacionados con la transición ecológica. Ambas expertas insisten en que las organizaciones deben enfocarse en el presente y el futuro de forma simultánea, anticipándose a los cambios mediante herramientas como simulaciones con IA y formación adaptativa. El nuevo grado en Gestión de la Sostenibilidad, Transformación Digital y Medioambiente de la UOC es una respuesta concreta a esta necesidad, diseñado para formar líderes capaces de integrar la sostenibilidad en el núcleo empresarial.
El informe destaca que el uso de la inteligencia artificial, blockchain y big data está transformando la gestión ambiental dentro de las empresas. Casos como el mantenimiento predictivo para evitar fallos industriales, o la optimización en tiempo real del consumo energético, demuestran cómo la tecnología y la sostenibilidad se complementan. Además, herramientas como la realidad virtual o la gamificación ya se utilizan en procesos educativos para simular escenarios sostenibles e impulsar una cultura de innovación, métodos que permiten formar líderes con soft skills clave, como el liderazgo verde y la colaboración interdisciplinaria.
La medición del impacto también es primordial y el uso de KPIs ESG (criterios ambientales, sociales y de gobernanza) permite a las organizaciones evaluar su progreso en sostenibilidad y atraer inversiones responsables. Según Harvard Business Review, el 85% de los inversores los consideran decisivos en sus decisiones. El desarrollo de una cultura empresarial en consonancia con los ODS de la ONU y el fortalecimiento de colaboraciones entre universidades y empresas se perfilan como cruciales para reducir la brecha de talento y garantizar una transformación justa y efectiva.
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