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Nueva York – El expresidente estadounidense, Donald Trump, arreció este viernes su ataque contra Kilmar Ábrego García, el salvadoreño residente en EEUU deportado por error, aludiendo a una investigación inconclusa sobre el hombre y un caso de asesinato que no está relacionado con él.
En declaraciones a la prensa en el Despacho Oval, Trump fue cuestionado sobre la reunión de ayer en El Salvador del senador demócrata Chris Van Hollen con Ábrego García, quien fue expulsado de EEUU el 15 de marzo a pesar de tener estatus legal y enviado a una prisión de máxima seguridad.
Las autoridades migratorias estadounidenses han admitido haber deportado por error a Ábrego García, residente en Maryland, casado con una estadounidense y al que un juez había prohibido regresar a su país.
Trump insistió hoy en que el hombre era un “extranjero ilegal” y miembro de la pandilla MS-13, después de lo cual la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, le entregó un folio con su supuesto historial criminal, que el presidente afirmó provenía “del Departamento de Estado y fuentes muy legítimas”.
“Les estoy dando lo que me acaban de añadir. Se supone que esto son cosas certificadas: en 2019 a García le dieron una orden de deportación, y dos jueces afirmaron que García era miembro de la MS-13”, dijo, aunque su pertenencia a la pandilla no ha sido certificada por ningún tribunal.
También hizo mención a una denuncia por violencia de género en 2021 de su esposa, Jennifer Vasquez Sura, que ha abogado por su retorno, y que este pasado miércoles dijo que actuó “por cautela” tras una relación anterior violenta y que lo superaron “como familia, incluyendo ir a terapia”.
Y, sin establecer una conexión clara en sus declaraciones, Trump procedió a hablar, como ya hizo esta semana, de Rachel Morin, una mujer asesinada por un migrante salvadoreño en 2023.
Tras las declaraciones de Trump, el Departamento de Seguridad Nacional de EEUU (DHS, en inglés) publicó un “informe investigativo” sobre Ábrego García que lo califica de “sospechoso de trata”.
Esas sospechas parten de una retención de tráfico en 2022, en la que fue hallado en su vehículo con ocho personas a las que supuestamente trasladaba desde Texas sin equipaje para un “trabajo de construcción”; sin embargo, solo recibió una citación de aviso por conducir con una licencia vencida.
En ese mismo informe, el DHS indica que en 2019, la unidad de pandillas de la Policía del condado de Prince Georges (Maryland) lo “validó” como miembro de la MS-13 porque una “fuente” lo identificó como tal.
Ese año, fue detenido por autoridades migratorias después de que un informante anónimo lo vinculara con la MS-13. Él presentó una petición de asilo y protección contra la deportación, y esta última fue aprobada por el juez.
El jueves, un tribunal de apelaciones rechazó el intento del Gobierno de EE.UU. de frenar el retorno de Ábrego García, y previamente el Supremo ha respaldado un fallo judicial para que este “facilite” su regreso. EFE
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