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“Estamos observando semanalmente más de cinco casos de patologías óseas tumorales, en comparación con los casos vistos antes del Covid, lo que indica un incremento significativo y debemos tener en cuenta estas estadísticas, lo cual nos ha motivado a iniciar una investigación”, señaló De León.
De hecho, en el reciente Almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio, el director del Servicio Nacional de Salud (SNS), citaba entre las enfermedades más frecuentes que se atienden en los hospitales las neoplásicas, después de los trastornos cardiovasculares, hipertensión, diabetes, afecciones respiratorias y las enfermedades gastrointestinales.
A través de un comunicado, De León reiteró que, tras la pandemia en el país, se están analizando datos anuales, los cuales han revelado diagnósticos que no han sido fortuitos, como el cáncer de hueso y de pulmón.
“Debido a las investigaciones, quizás por otra patología, y al verificar los resultados de los exámenes físicos y todos los estudios realizados a un paciente para prepararlo para una cirugía, hemos encontrado alguna neoplasia, algún tipo de tumor, de cáncer”, manifestó.
Los especialistas señalaron que los tumores detectados presentan características tanto benignas como malignas, y en muchos casos se descubren de manera accidental al preparar a los pacientes para cirugías por otras causas.
El principal síntoma que lleva a los pacientes con este tipo de tumores óseos a buscar atención médica es el dolor.
Los especialistas detallaron que esto sucede cuando los medicamentos dejan de hacer efecto, comienzan a cojear o a sentir dolor en las articulaciones, así como un aumento del área anatómica.
Durante el fin de semana pasado, los médicos realizaron una cirugía de alta complejidad para extirpar un tumor de células gigantes en la tibia proximal, con comportamiento maligno.
Una vez realizada la intervención quirúrgica, donde se extirpó el tumor de rodilla completa, se colocó al paciente una prótesis modular tumoral.
Explicaron que la prótesis modular permite evitar la amputación, preservando la función de la extremidad, lo que puede mejorar la movilidad y la calidad de vida del paciente, permitiéndole realizar actividades diarias.
“Realizamos una resección del fémur distal hasta la tibia, procedimiento que se extendió por siete horas”, añadió De León.
Asimismo, el especialista en trauma, dijo que para realizar el procedimiento quirúrgico fue necesario disecar los vasos, los nervios de la extremidad inferior del paciente, para poder mantener con viabilidad el miembro inferior derecho del paciente.
“Se colocó una prótesis modular tumoral que tiene una fijación a nivel del fémur, una bisagra que hará las veces de rodilla y la implementación de varios módulos para conformar lo que es la tibia y una fijación intramedular, luego de eso se hizo una reconstrucción”, dijo.
De León puntualizó que el paciente se encuentra en buenas condiciones de salud, al tiempo que indicó que este es un procedimiento que permite que el paciente conserve su miembro, tenga la funcionalidad de la prótesis y le permita realizar sus actividades físicas, laborales y deportivas.
Los especialistas exhortaron a los pacientes que presenten síntomas a no automedicarse y a visitar a su médico, ya que una atención oportuna le permitirá al facultativo de la salud iniciar un tratamiento a tiempo.
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