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Santiago.- El doctor Reynaldo Peguero, planificador y estratega urbano, sostiene que, más que una cuestión de regionalización, en el Jardín Botánico Nacional ha faltado una estructura de gobernabilidad e institucionalidad como existe con los órganos de parques de Santiago, en los que participa el sector privado, la sociedad civil, la Gobernación, el Ayuntamiento, la Oficina Senatorial y los diputados.
Afirmó que desde finales del 2004 se designa en el Botánico Nacional a personalidades que poco saben de gestión ambiental, ignorando a las juntas de vecinos de su entorno y a los propios técnicos, planificadores y urbanistas capacitados del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec).
“No se designan personas a dirigir una institución como el Jardín Botánico Nacional, sino a instituciones, creando un consejo que designe a un director ejecutivo por concurso y luego esa persona se nombra por decreto”, explicó Peguero, presidente de la firma Strategius, Colectivo de Investigadores y Consultores.
Tras las opiniones encontradas por el proyecto vial en el entorno del Jardín Botánico, Peguero manifestó que el carácter rebelde de los capitaleños es reincidente y refractario, lo que, a su juicio, desde hace años los ha conducido a protestar antes que planificar.
“En vez de estudiar, se oponen a las propuestas. Cuando aparecen indicios de lo que consideran “injusticia”, protestan furiosos en medios y redes sociales”, aseguró el exdirector ejecutivo del Consejo de Desarrollo Estratégico de Santiago (CDES).
Manifestó que, como los capitaleños no tienen una planificación estratégica como en Santiago con sus autoridades, todo les parece “ajeno e inconsulto”.
Indicó que la protesta sin propuesta es la mejor evidencia de que la sociedad civil y el empresariado capitaleño hace mucho tiempo que perdieron el rumbo de la participación organizada en el desarrollo.
Sugirió una planificación estratégica urbana sostenible, como dijo desea impulsar la alcaldesa del Distrito Nacional, Carolina Mejía.
Recordó que cuando en el 1972 el doctor Joaquín Balaguer decidió emprender el proyecto Jardín Botánico Nacional los mismos o sus continuadores de hoy, que actualmente se lamentan, salieron a criticar al dictatorial pero visionario presidente santiaguero.
Señaló que Balaguer, de seguro influenciado por las amplias áreas verdes y multicolores que lo vieron nacer en Santiago, hizo aprobar la Ley 456-76, que creó y bautizó el Jardín Botánico como “Doctor Rafael María Moscoso”.
Lo fundó para defender la “flora nacional”, como se denominaba entonces a la cobertura vegetal, amenazada por el acelerado y caótico crecimiento urbano de la ciudad de Santo Domingo.
La aversión a la obra de Balaguer, diseñada por el arquitecto cibaeño Paiewonsky Batlle y la actual ausencia de planificación estratégica del sistema verde, generó un gran menosprecio por la arquitectura social.
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