Fort Worth, Texas. Para 26 madres y padres zacatecanos beneficiarios del Programa Corazón de Plata, terminó la espera de 16, 20 y hasta 25 años para reunirse con sus hijos.
El viaje de más de 18 horas desde Zacatecas hasta Fort Worth, Texas, Estados Unidos, fue mínimo para padres como Don Máximo Andrade, de 90 años, cuyo sueño de reencontrarse con sus hijos y conocer en persona a sus nietos se hizo realidad hoy, sin importar la edad.
La sala estaba abarrotada de hijos, hijas y nietos que esperaban con ramos de flores, globos y carteles de bienvenida a sus padres y abuelos. Familias enteras estaban presentes para reunirse con sus seres queridos, incluidos tíos, primos y nueras.
Los días de 12, 13, 17, 20 y hasta 25 años sin verse fueron cosa del pasado, gracias a los beneficios del programa Corazón de Plata del Gobierno del Estado de Zacatecas.
El programa se realiza en colaboración con la Organización Club Zacatecano en Estados Unidos. En esta ocasión, el grupo contó con el apoyo de la Federación Casa Zacatecas en Fort Worth, Texas, que preside Francisco Álvarez Calderón.
A algunos, como el matrimonio de Francisca de Luna y Francisco Delgado, de Ojo Caliente, les habían negado la visa nueve veces, mientras que otros, como don Santos Beltrán Medina, habían intentado obtenerla seis veces. Lograron obtener visados a través de Corazón de Plata.
Sus padres eran originarios de los municipios de Ojo Caliente, Río Grande, Guadalupe, Pánfilo Natera, Sombrerete, Saín Alto y Fresnillo.
El Gobierno del Estado acompañó al grupo a través de la Secretaría del Zacatecano Migrante (Sezami), que encabeza Iván Reyes Milán.
Francisco Álvarez Calderón, presidente de la Federación Casa Zacatecas en Fort Worth, Texas, comentó que este grupo de Corazón de Plata es el número 15 de padres e hijos reunidos por la Federación en colaboración con el Gobierno del Estado de Zacatecas. Hoy, eso se ha convertido en una realidad”.
Francisco de la Torre, Cónsul General de México en Dallas, felicitó al Estado de Zacatecas por este encuentro que reunió a las familias con sus sueños. Exhortó a los hijos a querer y disfrutar a sus padres.
