La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) allanó el camino para que la ONU declarara el 16 de noviembre Día Internacional de la Tolerancia con motivo del 125 aniversario del nacimiento de Mahatma Gandhi en 1994. Dos años más tarde, la Asamblea General de la ONU instó a los Estados miembros a celebrar este importante día.
La lucha contra la impunidad requiere un marco jurídico. La aplicación estricta de la legislación sobre derechos humanos, la prohibición de los delitos penales y la discriminación injusta y la garantía de igualdad de acceso a los tribunales son aspectos fundamentales de esta lucha.
La lucha contra la impunidad requiere educación. La instrucción constante sobre este tema y su relación con los derechos humanos es esencial para prevenir la ignorancia y el miedo a lo desconocido y evitar que se formen actitudes ignorantes en las personas.
El acceso a la información es necesario en la lucha contra la intolerancia. Promover una legislación que garantice el derecho a la información y la libertad de prensa puede evitar que se utilice la intolerancia en el ámbito político y territorial.
La intolerancia en la sociedad es el resultado de la intolerancia individual. Por lo tanto, es esencial examinar el papel de los seres humanos en el círculo vicioso que conduce a la desconfianza y la violencia en la sociedad.
La lucha contra la intolerancia requiere soluciones locales: a pesar de ser un problema global, las soluciones pueden encontrarse a nivel local, casi individual. Cada individuo es parte de la solución y la no violencia puede ser una herramienta muy eficaz para abordar el problema, crear un movimiento y mostrar solidaridad con las víctimas de la intolerancia.
¿Cuáles son las características de una persona compasiva?
La ONU dice estar comprometida con el fortalecimiento de la tolerancia mediante la promoción del entendimiento mutuo entre culturas y pueblos. Este imperativo tiene sus raíces en la Carta de las Naciones Unidas y en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, y es de crucial importancia en una época caracterizada por el auge del extremismo y el radicalismo violento, así como por conflictos caracterizados por un desprecio fundamental por la vida humana.