Washington. El número récord de migrantes que llegan a la frontera entre Estados Unidos y México ha puesto en una posición peligrosa al presidente estadounidense, Joe Biden, que enfrenta presiones de miembros de su partido y de la oposición republicana para actuar con rapidez. En solo los primeros 28 días de diciembre de 2023, la Patrulla Fronteriza detuvo a 235.000 migrantes que intentaban cruzar ilegalmente a México, según datos de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) que observa CBS. Estas cifras significan que cada día son detenidos 8.400 migrantes que intentan llegar a Estados Unidos. Los datos de diciembre marcan un récord: nunca ha habido tantos migrantes desde que comenzó la recopilación de datos en 2000. Este aumento se suma a los más de dos millones de personas ya detenidas en el año fiscal 2022 y nuevamente en el año fiscal 2022. 2023. Estas cifras reflejan la desesperación de las personas dispuestas a arriesgarlo todo para escapar de la violencia y la pobreza y encontrar una vida mejor. Según CBP, la ola migratoria desde Venezuela, Colombia y Haití ha aumentado significativamente en los últimos meses. Esta realidad ha provocado una tormenta política que solo se intensificará a medida que avance la campaña electoral de noviembre, ya que el expresidente Donald Trump (2017-2021) aprovecha el tema para atacar a Biden y presionar a sus oponentes que aspiran a ganar la nominación presidencial republicana. . . negociar con mexico Para resolver la crisis, Biden envió la semana pasada una delegación de alto nivel a México para acordar con el presidente de ese país, Andrés Manuel López Obrador, fortalecer los esfuerzos de ambos países para prevenir la trata de personas, luchar contra la trata de personas y desmantelar las redes criminales, según hasta la declaración final. Aunque no se anunció ningún acuerdo específico tras la reunión, México y Venezuela anunciaron el sábado la reanudación de los vuelos de repatriación de venezolanos a territorio mexicano, una medida destinada a reducir el número de venezolanos a Estados Unidos. También se reabrieron los pasos fronterizos cerrados por EE.UU., poniendo fin a una situación que podría haber causado daños millonarios a la economía mexicana. Al mismo tiempo, Biden está envuelto en una espinosa negociación con los republicanos, que han dejado claro que sólo aprobarán la ayuda a Ucrania que el presidente ha solicitado durante meses si acepta tomar medidas para debilitar los derechos de asilo. y reforzar las fronteras. El presidente ha expresado su voluntad de asumir compromisos significativos en la frontera y, según informes de los medios, podría considerar restablecer el controvertido Título 42, utilizado por primera vez por Trump durante la pandemia para deportar inmediatamente a los migrantes sin permitirles solicitar asilo, y que Biden retuvo. . Críticas a los alcaldes demócratas La crisis fronteriza está generando críticas hacia Biden por parte de otros miembros de su partido, incluidos los alcaldes de Nueva York, Chicago y Denver, quienes advierten que carecen de recursos para abordar las acusaciones de llegada de inmigrantes a sus fronteras. . Desde principios del año pasado, varios gobernadores republicanos, incluido Greg Abbott de Texas, han enviado miles de inmigrantes indocumentados a ciudades gobernadas por demócratas en un esfuerzo por aumentar la presión sobre Biden.
La llegada récord de inmigrantes pone a Biden en una situación difícil

Washington. El número récord de migrantes que llegan a la frontera entre Estados Unidos y México ha puesto en una posición peligrosa al presidente estadounidense, Joe Biden, que enfrenta presione.