Sería sorprendente que los resultados del plan anunciado fueran diferentes a los de otros países. Cuando el río resuena es porque trae agua. Aunque, tal como lo señalaron el presidente Luis Abinader y el ministro de Trabajo Luis Miguel De Camps, el plan piloto de reducción voluntaria de jornada laboral en tres empresas privadas y dos instituciones públicas del país no implicará modificar el Código del Trabajo.
Laborista, esto es una señal de que esta es la carta que quedará en la mesa de negociación para reformar el Código, proceso que continúa en privado. De hecho, aunque el país no debe apresurarse, tampoco debe quedarse al margen de la tendencia a reducir la jornada laboral que se está extendiendo en todas las regiones del mundo. La implementación de pilotos similares en empresas del Reino Unido, Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos, Canadá, Sudáfrica y Portugal para reducir la jornada laboral de 44 horas a 36 horas semanales ha arrojado resultados positivos.
anunciados, como la mejora de la productividad, la menor rotación y la mayor capacidad de atracción de talento. Y sería sorprendente que los resultados del plan anunciado para República Dominicana fueran diferentes y fueran en contra de la tendencia mundial encaminada a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y reducir paulatinamente la jornada laboral. Actualmente, República Dominicana no se encuentra entre los países latinoamericanos con mayor jornada laboral, es decir manteniendo las 48 horas.
Gracias a que el Código del Trabajo de 1992 redujo la jornada a cuatro horas, República Dominicana está incluida en el grupo con jornadas de 44 horas, que también incluye a Guatemala, El Salvador, Honduras, Cuba, Brasil y Venezuela. Pero todavía está por detrás de países líderes con jornadas laborales de 36 horas, como Ecuador, Chile y algunas islas del Caribe (Belice, Trinidad y Tobago). En los países de la OCDE la jornada laboral promedio es de 37 horas semanales y en México y Uruguay actualmente hay discusiones para reducirla a 40 horas semanales, que es la jornada actual en la mayoría de los países europeos, a excepción de las escuelas, compatible con Francia.
. la jornada es de 35 horas e Islandia, donde se realizaron pruebas de 2015 a 2019, redujo la jornada laboral de 40 a 35 o 36 horas semanales. Aunque los resultados del plan piloto confirman que la reducción de la jornada laboral mejorará la productividad, la prudencia no recomienda esperar hasta la reducción de la jornada laboral de 44 a 36 horas, teniendo en cuenta las diferencias de productividad.
sector de la economía evaluado, factor que es necesario tener en cuenta para no erosionar la rentabilidad de las empresas. Lo más probable es que la discusión en el marco de la reforma del Código se centre en la reducción de la jornada laboral a 40 horas, aplicada de forma inmediata o progresiva, según el cronograma establecido en el propio Código de Reforma. Quizás esto nos ayude a prepararnos para un futuro lejano en el que los robots puedan trabajar para los terrícolas, quienes, sin nada más que hacer, pasarán su tiempo viajando por el espacio, moviéndose dentro de sus límites en naves de incuestionable velocidad e inteligencia.