El síndrome de Asperger, anteriormente considerado una condición separada dentro del espectro autista, fue reclasificado en la quinta edición del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5) con el término Trastorno del Espectro Autista (TEA) en 2013. Se trata de un trastorno orgánico del neurodesarrollo no degenerativo que puede diagnosticarse a una edad temprana. La prevalencia se estima en 2 a 7 nacimientos por cada mil nacimientos.
Puedes leer: Colangiocarcinoma, un tipo muy raro de colangiocarcinoma El síndrome de Asperger lleva el nombre del pediatra austriaco Hans Asperger, quien describió por primera vez el síndrome en 1944. Se caracteriza por dificultades en la interacción social y la comunicación no verbal, así como por comportamientos e intereses restringidos y repetitivos. Puede ocurrir simultáneamente con otros trastornos, lo que dificulta establecer un diagnóstico preciso.
Este es el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH). A estos pacientes se les realizó examen cerebral, potenciales evocados auditivos, vocalizaciones ota, electroencefalografía y resonancia magnética con o sin espectroscopia, para descartar problemas fisiológicos. La evaluación psicológica mediante escalas psicométricas fue realizada por un neuropsicólogo.
El tratamiento debe centrarse en las habilidades, intereses, preferencias y planes de la persona con síndrome de Asperger. La mayoría de los niños con síndrome de Asperger tienen patrones de desarrollo que se encuentran dentro de los límites normales y pueden pasar desapercibidos. El objetivo final es alcanzar el mayor nivel de autonomía y calidad de vida.
Y esto se puede conseguir en 4 aspectos: Los tratamientos cognitivo-conductuales pueden facilitar el desarrollo y la integración académica, social y laboral de estos individuos. Tratamiento farmacológico: dependiendo de los síntomas puede ser necesaria, de manera razonable y racional, una medicación psicotrópica. Pero no existe un tratamiento específico para el síndrome de Asperger.
Tratamiento educativo y psicológico, enfocado al desarrollo de sus actividades e intereses a partir de objetivos realistas, incluyendo los estudios, la integración social y el correcto rumbo profesional. En cuanto a la rehabilitación, el tratamiento incluye terapia ocupacional, terapia del habla y terapia conductual cuando sea necesario. Probablemente tengan una vida adulta más normal, con un trabajo o carrera relacionada con su campo de interés, a veces de manera muy competente.
En muchos casos, no debería haber barreras para acceder a la educación superior. ¿Quién establece el equipo multidisciplinar que realiza el seguimiento de las personas con Asperger? Neurólogos pediátricos, psiquiatras, psicólogos, médicos rehabilitadores, terapeutas ocupacionales, logopedas, terapeutas conductuales, terapeutas del aprendizaje, etc.
¿Pueden los niños con síndrome de Asperger tener una vida normal? Con el tratamiento adecuado, las personas con Asperger pueden aprender a afrontar algunos de los desafíos sociales y de comunicación que enfrentan. Pueden tener éxito en la escuela, en el trabajo y en la vida.
¿Cuáles son los principales signos del síndrome de Asperger? Las personas con síndrome de Asperger suelen hablar con una voz monótona, aguda o inusual. Tienen problemas para leer las señales y emociones sociales, y sus conversaciones tienden a ser egocéntricas o muy centradas en un tema en particular.
¿Qué puede causar el síndrome de Asperger? Los investigadores no saben qué causa el síndrome de Asperger, pero creen que puede deberse a anomalías genéticas y cerebrales. Desarrollo neurológico La secuencia ordenada y ordenada de cambios que sufre nuestro sistema nervioso a lo largo de la vida y que tiene como resultado la adquisición de nuevas y más complejas capacidades funcionales.
Síndrome Conjunto de síntomas característicos de una enfermedad o condición particular.