Actualidad

Suelen hacer lo mismo, porque los que vienen son los mismos que los que se van

caruri 1872.png
caruri 1872.png
Porque: Los tontos no dicen cosas inteligentes; Pero la gente inteligente tiende a decir muchas estupideces.

Porque: Los tontos no dicen cosas inteligentes; Pero la gente inteligente tiende a decir muchas estupideces. Se ha establecido que el sedentarismo es perjudicial para la buena salud del cuerpo humano y de la misma manera esto también les sucede a los organismos creados por el hombre para el buen desarrollo o la convivencia con otras criaturas en la ‘sociedad’. Esta situación llevó a la creación de agencias aduaneras, lo que en muchos casos provocó que estas organizaciones actuaran como si fueran un tiovivo, girando en torno a los mismos hechos o errores que las hicieron estancarse y no poder funcionar en el tiempo.

Este no es un caso aislado, pero últimamente se ha convertido en una mala costumbre hacer siempre lo mismo, incluso cuando los tiempos y las circunstancias cambian, esperando lograr los mismos resultados que ayer. Hay una reticencia a permitir que se produzca uno de los principales actos de la naturaleza, que es el cambio constante de las cosas, para sobrevivir, para que puedan adaptarse a los constantes y variables cambios que hoy nos trae el devenir de la vida. por fecha.

En los primeros días de adoptar estas actitudes letárgicas que vemos hoy y estar absortos en tareas rutinarias y cotidianas, parecía, y resultó con el tiempo, que muchas organizaciones estaban avanzando hacia un estado de ineficacia en gran medida, arraigado con semillas de apatía y apoyados por una burocracia brutal que los convierte día a día en entidades con más fallas institucionales que un trozo de queso suizo. Y, si a todo esto le sumamos la corrupción, con la característica de que ha adoptado el comportamiento de un cáncer, entonces parece que cualquier acción que se tome para eliminarlo se convertirá en una acción inútil. Lamentablemente, esto es lo que está pasando -para empezar- con la Policía Nacional, una organización que se ha visto atraída por grupos de interés particulares y donde, de manera increíble, los políticos la han dividido, teniéndola como si fuera un partido político.

. , con sus facciones y subgrupos, cada uno por su lado, donde hasta el uniforme tiene significado. Podemos asegurarles que desde este punto de referencia – incluso entre los partidos políticos – se ha extendido el veneno del irrespeto a la ley, porque incluso ellos se han respetado entre sí.

Falta de formación policial; Corrupción; gestión irrazonable del empleo de los empleados; falta de planificación para llevar a cabo la misión de establecer el orden y el respeto a la ley; la extensión injustificada de la fuerza mediante el establecimiento y mantenimiento de puestos y unidades, destinada únicamente a satisfacer intereses particulares o como medida de control fuera de lugar sobre una población y sus recursos y absurda; la falta e implementación de procedimientos adecuados para mantener el control sobre la conducta, tanto dentro como fuera de los cuarteles, de los elementos que integran este cuerpo policial, llamado asuntos internos o como se llame que se quiera; La falta de interés en controlar y mantener los recursos a su disposición, incluidos los medios de comunicación, donde sólo ven las partes que corresponden a sus prejuicios, como la propaganda individual, constituye – claramente – sólo una parte de la lista interminable de ineficiencias, absurdos y terquedad que hoy estrangula esto. En cuanto a cómo esta institución sobrevive a la política y a la combinación de inacción, ineficiencia y corrupción, tal vez encontremos la respuesta en definir el término equilibrio, es decir, ha mantenido su estado o existencia, porque estas dos fuerzas se han encontrado, y lo que opera en ellos, compensándose unos a otros, destruyéndose unos a otros. Una existencia que cree existir, cuando en realidad no es así.

Y la razón por la que no cambia se encuentra en la primera ley de Newton, que establece que un objeto no puede cambiar su estado de reposo o movimiento a menos que sobre él actúe una fuerza externa. No podría ser más claro, se sucedieron a través de los movimientos políticos que hicieron, pero no con la esperanza de que esto pudiera producir el cambio institucional que el pueblo esperaba y necesitaba. Así que nada más.

¡Sí, señor!

TRA Digital

GRATIS
VER